Lo que parecía fue. El gobierno socialista, el del encubrimiento del Caso Couso, también se entregó a EE.UU de manera servil para dañar las libertades en la red. La estrategia de EE.UU cuenta con la colaboración de los abogados de Telefónica, pero mucho menos acreditada que la de la SGAE o Promusicae que aparecen como lo que son, una mera extensión del Plan de EE.UU.
Y en lo político… Después de lo de Couso, desgraciadamente, nada sorprenderá a los españoles de bien que habitan la Nación Red. (O sí). Desde luego los ciudadanos digitales que hemos seguido y constatado las presiones del lobby Serrano no nos soprendemos. Pero Julian Assange nos ha permitido certificar la indecencia del gobierno de España también en lo digital. No son de los nuestros. Se someten a los intereses comerciales que defiende la embajada de otro país que más parece la sede española de Microsoft y la “potente Motion Pictures Association, que agrupa a las majors de Hollywood”.
Pero la noticia no es que EE.UU presione o elabore un plan. La noticia es que el Gobierno de España, también de los periodistas de El País, cedió a las presiones de EE.UU y sus aliados (la SGAE y Promusicae) que campaban por Serrano 75 como Pedro por su casa, maquinando y ayudando a maquinar contra la libertad en Internet para que pasará lo que pasó: la Ley Sinde.
Estos son los representantes de los creadores que compaginan la defensa de Teddy Bautista y la crítica al imperialismo americano. Son la generación tapón que siente la amenaza de las aguas libres: Internet. Definitivamente retratada. Por cierto, que El País no suelta los cables. Son más de 100 y hemos visto menos de 10. Más allá de la euforia de los dos blogueros y medio afínes a los topos del PSOE.
El plan de los americanos 2007-2012 sale según lo previsto. Un buen día visita España un alto cargo del Gobierno de los Estados Unidos con instrucciones muy claras: “Esta es la hoja de ruta de adónde queremos llegar y cómo”, señala uno de los pocos cables publicados por El País pero que prueba que el gobierno socialista pedía a los ISPs una propuesta específica para hacer frente a las descargas ilegales en Internet.
La embajada, claro, encantada. Por cierto que siempre lo hacía con copia a su gente en Bruselas. “Me topé con uno en un pasillo del PE”. Me decía a las 2:07 de esta madrugada un amigo que trabajo allí. Se topó con un topo. ¡Ay, lo que hemos hecho de Bruselas!. Una reproducción de lo peor de Washington y sin la sociedad civil de Washington. Todavía aplaudimos cuando nuestra clase política cede la soberanía a Bruselas también en materia de Neutralidad de la Red. En Filandia también nos ven muy débiles a los ciudadanos digitales españoles.
Nada nuevo. Nos toman el pelo. Lo peor. Nos mean encima y decimos que llueve. Por eso los americanos son merecedores de cierto “respeto”. Al menos son listos. Como Julian Assange. Pero los probrecicos Santos Inocentes de la Nación Red (departamento Hispania) deben espabilar y renovar sus liderazgos urgentemente o la Ley Sinde, incluso con esta victoria que nos ha regalado Julian Assange, nos la meterán doblada. Al tiempo, que es muy escaso. Por ahí fuera ya piensan que somos un poco incapaces. ¿No ha dimitido el fiscal ni el portavoz del PSOE? No, no. Pues eso es culpa vuestra. Sí.
El apoyo de las estrellas de la Industria del entretenimiento al PSOE lo hace especialmente “sensible” al Plan
Tenemos al señorito americano, los matones, los capataces del PSOE y hasta topillos del PP. Pero el plan que culmina con la aprobación de la Ley Sinde aprovecha la veta común que coaliga al artisteo y el PSOE. No era un mito. La embajada que tapa el crímen de Couso y los artistas de la Industria de la ceja hace causa común. La gran coalición, que no es exactamente la de Olcese, el amigo de Marruecos (Corrupción en Palacio).
Es indudable, aunque El País no lo vaya a destacar, como la responsabilidad de Rubalcaba y Alonso en el Caso Couso, que la gran coalición de intereses del copyright y la conspiracion para hacer posible lo que ya está en el BOE, la Ley Sinde, pasa por la ceja:
El cable 27536, elaborado por el agregado al día siguiente de la conversación con De la Vega, se cierra así: Dada la cantidad de estrellas de la industria del entretenimiento con una abierta preferencia por el Gobierno socialista es posible que este Gobierno sea especialmente sensible a hacer algo en este sector. Necesitaremos un año o así para ver si esta sensibilidad se traduce en resultados.
Desgraciadamente El País no ha publicado más que un ínfimo número de cables, pero la colaboración de la Sociedad General de Autores (SGAE) y la Asociación de Productores Musicales (Promusicae) con la embajada queda reflejaada como lo que es y “todo el mundo” imaginaba, una mera delegación comercial de los intereses de otro país que no es el nuestro. Un negocio transnacional que es estratégico para Washington. El peor Washington.
Lo imaginado. Trabajan para un lobby adosado al poder político de EE.UU que es ajeno pero sobre todo un peligro para la Nación Red. Un lobby que teje su poder sobre las mismas redes utlizadas para hacer prosperar a su industria de armamento. El papelón de los políticos españoles, más tarde analizaremos el papelín del PP, dantesco. Patético. ¿Los medios? Incalificable. Con Couso y su familia. Ayer ni les publicaron las declaraciones que hicieron a la prensa.
Nos faltaba una huelga de controladores. Tan oportuna como aquella que coincidió con el Congreso de UCD en Palma de Mallorca poco antes del 23-F. Aquel golpe sin aclarar que tuvo los días precedentes a la misma embajada de protagonista estelar en la trastienda de la verdad oculta. Habrá tiempo de analizar el perfil biográfico de los topillos (no están todos) y alguna anécdota sobre el instrumento de presión, la lista Especial 301 que sirve como amenaza contra el Gobierno de España, que progresivamente se va achantando.
El 15 de octubre de 2008, Salvador Soriano, Subdirector General de Servicios de la Sociedad de la Información, hace su papel, informar, pero a los americanos. Asimismo, Carlos Guervós, Director Adjunto de la Propiedad Intelectual en el Ministerio de Cultura, se explica:
Los perros ladran, pero la caravana continúa
La frase lo dice todo. El Plan trazado sigue. A pesar de nuestras protestas de las que se informa a Washington. Pero el topo de Sinde cabalga con los americanos para valorar el alcance de los ladridos de los “perros” del Manifiesto o del abogado Carlos Sánchez Almeida, que aparece citado para orgullo de la Nación Red. También se cita a la Asociación de Internautas. La gran movilización preocupó en la embajada de Serra/no, pero el hombre de Sinde les tranquiliza. “Ahora es el momento de su Ministerio”. Vaya que sí.
Un año más tarde llega la polémica Ley antidescargas. El 27 de noviembre 2009, el Gobierno envía al Congreso la Ley de Economía Sostenible y cuela en el paquete, la Ley Sinde.