En el bando donde están los enemigos de la libertad digital nadie destaca más que los grandes negociantes del Copyright y de la Seguridad, con media clase política a su servicio, pero los talibanes digitales, clérigos y policías de la moral, son el otro grupo de presión más nocivo para la libertad en la red. En la India, una gran nación que ha encontrado vías alternativas para no subirse al tren del imperio, con las Iglesias han topado los ciudadanos libres y digitales.
Ahí arriba está la foto de Kapil Sibal, el ministro de Comunicaciones y Tecnología de la Información de la India, que ayer exigía a Facebook, Google y otros grandes de internet que pongan inmediatamente en marcha algún tipo de mecanismo para filtrar todo contenido que pueda dañar los sentimientos religiosos de una gran parte de las comunidades de la India. El ministro ha advertido que "no podemos permitir" que esto continúe:
"Deben desarrollar un mecanismo por su cuenta para asegurarse de que tales contenidos se eliminan tan pronto como se conozca de su existencia... Yo les he dicho que esto no puede seguir así. Yo creo que ninguna persona razonable, consciente de la sensibilidad de una gran parte de las comunidades en este país, desearía que estos contenidos sean de dominio público", explica el ministro.
Para el gobernane "a iniciativa no afectaría ni directa ni indirectamente a la libertad de prensa". La preocupación del ministro está en las redes sociales. Lo que le preocupa son los "cuatro tuiteros".
Vía | The Hindu