El virus informático que sabotea las centrifugadoras del programa nuclear iraní y que cibermilitares, ingenieros y científicos de Israel perfeccionan en el desierto del Negev (foto), donde Israel incluso habría reproducido centrifugadoras idénticas a las que tiene Irán, es el responsable de los retrasos en el programa nuclear del país que amenazó al Estado de Israel con borrarlo del mapa.
Irán insiste en que sólo pretende desarrollar energía nuclear con fines pacíficos, pero diversos gobiernos occidentales sospechan que su verdadero objetivo es hacerse con la tecnología para fabricar armas nucleares.
Menos énfasis ponen los gobiernos occidentales (y Naciones Unidas) en relación con el software contra el que va dirigido el ciberarma secreta de Israel: el software de la alemana Siemens para el control y protección de las plantas industriales/nucleares de Irán. Un asunto más que delicado y con indudables connotaciones "históricas".
Más Información | The New York Times