El "camarada" Vladimir Putin firmó el sábado el decreto por el que se crea el Registro de webs "peligrosas". La ley establece que sean los proveedores los que deben bloquear el acceso a las webs de la "lista negra" cuando no lo haga el propietario de la página.
Aquellas webs que promueven la pornografía infantil, venden drogas o dan consejos para suicidarse serán cerradas por orden de los propios gestores gubernamentales del Registro. En otros casos - aquellas webs que promueven la violencia, el terrorismo o el odio étnico y religioso - se esperará a conseguir una orden judicial antes de proceder a su "eliminación".
Las referencias a la "violencia y el terrorismo" hacen temer a la oposición (más cívica que política) que sirva para poner en la lista negra aquellas webs en las que se convocan “algaradas”. Nueva amenaza que inquieta a nivel global a los servidores del Sistema (de corrupción y privilegios).
Putin también firmó el sábado 21 de julio el decreto por el que se crea el registro de ONG que reciben financiación internacional y participan en la vida política del país. Hoy comienza, por cierto, el juicio contra las integrantes del grupo punk ruso Pussy Riot, encarceladas desde el mes de marzo por "gamberrismo" (atentar contra los valores tradicionales de la iglesia Ortodoxa Rusa). Rusia, eterna.
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