El PSOE intentaba ayer consolidar* el acuerdo con los nacionalistas para aprobar mediante un mecanismo de excepción la ley que hemos bautizado con el apellido de la ministra peor valorada del ejecutivo. Si bien ahora ha sido renombrada como Sindegate al evidenciarse que la aprobación de la Ley Sinde es parte esencial de un minucioso plan diseñado en los EE.UU y coordinado en España por el embajador.
La sorpresiva maniobra para aprobar este martes la Ley Sinde es un buen reflejo de las exigencias del embajador, desveladas por WikiLeaks, en las que el máximo representante de EE.UU en España muestra su preocupación por un posible “debilitamiento” de la ley en el trámite parlamentario.
También se solapa la maniobra con las amenazantes declaraciones del lobbista y presidente de la Coalición de Creadores, Aldo Olcese, que aparece en los cables como una referencia de poder al mismo nivel que los ministros y Secretarios de Estado. Desde la izquierda del Grupo Mixto alguien nos apunta a Olcese como el verdadero hombre clave de todo el proceso y se sugiere prestar atención a los contactos entre el lobbista y el nacionalismo catalán.
Precisamente en la tarde de ayer fuentes próximas al ejecutivo, que presumen de tener asegurados los apoyos de PNV y Coalición Canaria, intentaban sumar los votos de CiU a cambio de introducir algunas de sus enmiendas a la LES. Pero la vicepresidenta Elena Salgado reconocía en público algunas dificultades para cerrar un acuerdo sobre “este apéndice de la Ley de Economía Sostenible” conocido por Ley Sinde.
En CiU hay división de opiniones pero también cierto escepticismo sobre una intervención de Artur Mas para enmendar la plana a Duran Lleida, más próximo a las tesis pactistas del PNV. El pesimismo cundía entre alguno de los diputados más proclives a la libertad en la red de Convergencia Democrática de Cataluña:
Esto lo lleva Duran.
Lo que está claro es que de los nacionalistas de centro-derecha depende la aprobación o no de la Ley. El PP, Izquierda Unida, UPyD, BNG, ERC y Nafarroa Bai han criticado que después de tanto tiempo con el proyecto estancado en el Parlamento, ahora se quiera completar el trámite “a toda velocidad” – en navidad – y en una Comisión en la que no están representados todos los diputados, y materias como la propiedad intelectual e Internet son ajenas a la misma.
Aplicando además un mecanismo de excepción denominado competencia legislativa plena por el que bastaría discutir y aprobar la ley en Comisión sin se debatida por el pleno. Un escándalo mayúsculo al que se añade la “maquiavélica elección de fechas”, en palabras de un diputado, para perpetrar el mayor desprecio a los ciudadanos digitales que hasta hoy hemos conocido.
Ante semejante panorama, Gaspar Llamazares y la diputada de ICV, Nuria Buenaventura, que ha sustituido a Joan Herrera, han presentado una petición de urgencia a la Mesa de Congreso de los diputados para lograr la avocación al pleno del proyecto de ley.
Con esta iniciativa IU-ICV quiere enmendar la desfachatez del PSOE y forzar que el dictamen se eleve a sesión plenaria para celebrar un nuevo debate. Esa petición ha de ser aprobada por el Pleno del Congreso y, en caso de prosperar, retrasará la remisión del proyecto al Senado, ya que antes habría que debatirlo en el Pleno previsto para mediados de enero.
*El PNV aprovecha la decisiva influencia de sus votos para elevar a siete el número de sillones y sueldos en los organismo reguladores del Estado como la Comisión Nacional de la Energía (CNE), la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) o la Comisión Nacional del Sector Postal. La España digital se sonroja y el PNV vuelve por sus fueros Made in USA.
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En Nación Red | La Ley Sinde se vota el martes / El Partido Pirata denuncia la involución
