Ayer se producía un hecho sin precedentes en Túnez. La televisión pública nacional ofrecía declaraciones de Mokhtar Trifi, presidente de la Liga de los Derechos del Hombre en las que pedía la libertad de los presos políticos. Horas antes el dictador Ben Alí anunciaba cambios radicales que incluían la convocatoria de elecciones "verdaderamente libres" (en 2014) y el fin de la censura en Internet.
Mientras los partidos tradicionales de la oposición moderada (y tolerada) ya hablan de un gobierno de coalición con el partido dictador (Internacional Socialista) y se congratulan por el anuncio de Ben Alí al "corresponder a las expectativas de la sociedad civil y la oposición". No sabemos que opinan los comunistas o los piratas, detenidos e incomunicados.
Los activistas de la "generación red" que han tumbado la primera línea de defensa del corrupto Alí se muestran más cautelosos sobre las intenciones del tirano protegido por Occidente en el terreno militar, político, económico y mediático (silencio x negocios).
Cuando la "generación red" tumba la férrea línea de defensa del poder autoritario se evidencia que el poder ahora lo es también de los ciudadanos. Pero ahora llegará la partitocracia internacional, el consenso y el pasteleo de la inmunidad que se negociará en casa del embajador y un vicepresidente de la Internacional, según el procedimiento habitual.
Viejas trampas del poder compartido (consigo mismo) que violenta los nobles principios de la revolución de los ciudadanos digitales: transparencia y radicalidad democrática. El presidente Alí ha ordenado a las fuerzas de seguridad dejar de disparar con balas de verdad contra los jóvenes manifestantes. Nada dijo de perseguir a los responsables de más de 60 asesinados por balas ya disparadas, culatazos, torturas en prisión y patadas en la calle, tampoco pusieron mucho hincapié en ello alguno de los partidos "opositores" que hablan ya de consenso.
Pronto llegará (o lo intentará) una delegación internacional en la que se incuirá alguien del perfil de Gordon Brown, socio político de la dictadura y de la oposición moderada. Los hay que siempre están en el Poder, si bien la "generación red" (sin las cortapisas del papel) lo sabe y hace público. Además no están dispuestos a ceder.
Tiembla el poder, es Internet. La revolución global.
ACTUALIZACIÓN: El presidente tunecino Ben Ali ha abandonado el país. Miles de tunecinos han tomado las calles al grito de "¡Fuera Ben Ali!". Las televisiones tunecinas emiten imágenes en las que los manifestantes abrazan a los soldados. Incertidumbre y sonido de disparos en otros puntos de la capital.
En Nación Red | Anonymous lanza una gran operación contra la dictadura tunecina
