Tan pronto como dio comienzo el quinto día del drama judicial entre Uber y Waymo, el brazo de Alphabet dedicado a los coches autónomos, terminó. Los abogados de ambas partes han comunicado al juez este viernes por la mañana que han llegado a un acuerdo extrajudicial y los deseos de Uber se han cumplido. Se ha convertido en realidad lo que habían asegurado a sus inversores.
El acuerdo, según fuentes cercanas al mismo citadas por Bloomberg, contempla el pago de 245 millones de dólares estadounidenses para sellar la paz judicial. Según la CNBC, esa cifra corresponde al 0,34 % de participación en el capital social cuya última valoración asciende a 72.000 millones.
Uber vuelve a reconocer errores
El anuncio ha sido corroborado rápidamente por el nuevo CEO de la compañía, Dara Korosashahi, a través de un anuncio firmado por él mismo y publicado en la página web de Uber en el que se dirige tanto a Alphabet como a sus empleados entonando nuevamente el mea culpa. En el texto, pese a no hablar de cifras económicas, sí desvela el compromiso de no emplear tecnología de Waymo bajo ningún concepto, asegurándose completamente de ello.
Para ser claros, aunque no creemos que ningún secreto comercial haya pasado de Waymo a Uber, ni creemos que Uber haya utilizado ninguna información de propiedad exclusiva de Waymo en su tecnología de autoconducción, estamos tomando medidas con Waymo para asegurarnos de que nuestro software representa sólo nuestro buen trabajo.
Aunque no puedo borrar el pasado, puedo comprometerme, en nombre de todos los empleados de Uber, a que aprenderemos de él, y eso nos ayudará a seguir adelante. Le he dicho a Alphabet que la increíble gente de Uber ATG está enfocada en asegurar que nuestro desarrollo represente lo mejor de la innovación y experiencia de Uber en tecnología de autoconducción.
De dónde viene la guerra entre Uber y Waymo
Entre las muchas sombras que han rodeado a Uber en los últimos tiempos, desde la grave ocultación de un ciberataque al descubrimiento de un programa secreto para ocultar datos a cuerpos policiales, ha estado también la acusación de Waymo.
La empresa vinculada a Google acusó a la compañía de transporte de robarles información comercial. Fue a través de la compra de Otto por parte de Uber en 2016, una iniciativa fundada por un exdirectivo de ingeniería del proyecto de vehículos autónomos de Alphabet, Anthony Levandowski. Esto hizo que 14.000 ficheros con datos sensibles y diseños de tecnologías propiedad de Waymo fuesen a parar a las manos de Uber.
Con este acuerdo se cierra parcialmente un escándalo más de Uber y la empresa se ahorra una buena cifra, ya que el proyecto dependiente de Alphabet llegó a pedir como compensación más de 1.000 millones de dólares.
Imagen | Grendelkhan (CC BY-SA 4.0) En Xataka | Uber acuerda pagar a Waymo (Google) 245 millones de dólares para cerrar su batalla legal