Amazon ha anunciado que enviará dinero a sus socios para que puedan subir el salario por hora de sus repartidores, por el momento en Estados Unidos. Los aumentos salariales son parte de una inversión de 440 millones de dólares del programa de socios de servicios de entrega, que se lanzó en 2018.
Según la información que se acaba de filtrar, en promedio un repartidor ganará 20,50 por hora, más beneficios, aunque Amazon no ha confirmado esta cifra y sí se sabe que la cuantía dependerá más de las decisiones de las empresas socias.
La compañía anunció el aumento salarial en una conferencia anual a puertas cerradas llamada Ignite Live con las 3.500 pequeñas empresas que componen su programa de socios de servicios de entrega.
Amazon subcontrata a sus repartidores
El programa lanzado en 2018 cuenta con alrededor de 279.000 conductores en Estados Unidos, a menudo distinguibles por camionetas azules de la marca Amazon, y son responsables de entregar paquetes al cliente final.
No será Amazon quien aumente el salario de sus repartidores, sino que el gigante de ventas online va a dar el dinero a estas pequeñas empresas para que sean ellas quienes apliquen la retribución. Según Amazon el objetivo es que estas empresas pequeñas “puedan ofrecer salarios competitivos a sus empleados y construir y retener así sus equipos".
De todos modos, estas empresas serán “libres de fijar sus propios salarios e incentivos”, aunque Amazon establece un estándar de salario mínimo a través de los contratos que firma con sus socios.
Hay que tener en cuenta que las quejas de los repartidores de Amazon son una constante y que, al mismo tiempo, muchos críticos argumentan que la firma utiliza a conductores de reparto subcontratados para eludir la responsabilidad y evitar la sindicalización.
Lo mismo sucede en España. A pesar de ser una empresa con ventas millonarias, los conductores son subcontratados por otras empresas y en muchas ocasiones trabajan como autónomos. Hace unas semanas conocíamos el caso de una repartidora que fue despedida después de contar en redes sociales sus agotadoras jornadas laborales y los riesgos que corre como repartidora para conseguir cumplir los estrictos objetivos.
Amazon se enfrenta a sus conductores
Hay que tener en cuenta que este programa, de nombre DSP, ha sido un arma clave para que Amazon pudiera reducir su dependencia de grandes transportistas como el servicio de Correos en Estados Unidos o el gigante FedEx.
Al mismo tiempo, esta medida se produce cuando Amazon se enfrenta un nuevo impulso de la Hermandad Internacional de Teamsters para mejorar sus condiciones laborales. Tras largas protestas han conseguido que UPS suba los salarios de su plantilla y ahora buscan lo mismo con Amazon.
Imagen | Foto de Maarten van den Heuvel en Unsplash