Se acaba de descubrir que Alibaba, el gigante chino de comercio electrónico con amplia presencia también en España, fue víctima de una operación de "scraping web" durante meses por parte de un consultor de marketing que desvió datos sensibles, incluyendo nombres de usuario y números de teléfono.
Esta técnica consiste en rastrear textos (en esta caso con información privada) de páginas web con el objetivo de almacenarla y, en ocasiones, compartirla. No se hace de forma manual sino que se usan programas de software capaces de simular la navegación de un humano por Internet.
Según ha dictaminado un tribunal de China, un empleado de una consultora que ayuda a los comerciantes en la tienda en línea Taobao, la página más grande propiedad de Alibaba, fue quien extrajo más de mil millones de datos de los usuarios y compradores desde 2019, para servir a sus clientes empresariales.
Multa y consecuencias del rastreo de información privada en Alibaba
El tribunal ha impuesto penas de cárcel de más de tres años al empleado y a su empleador junto con varias multas que juntas suman 70.260 dólares.
Un comunicado oficial de Alibaba afirma que ninguno de los datos de los clientes ha sido vendido y que los usuarios de Alibaba no sufrieron pérdidas financieras por esto. Alibaba cuenta con mucha popularidad en España y aún queda por ver que realmente esta sustracción de datos no tenga consecuencias.
Esta noticia no es algo aislado. En China esta práctica es común. De hecho, el gobierno del país anunció recientemente su intención de hacer más estricta la legislación en cuenta al manejo de los montones de información que los gigantes de Internet, entre los que se encuentra Alibaba, recogen diariamente de cientos de millones de usuarios.
Las acciones del gigante del comercio electrónico cayeron más de un 1% en las operaciones de Hong Kong el miércoles, tras conocerse esta información.