Pese a las dudas sobre su proporcionalidad y las críticas suscitadas por "violar los derechos de privacidad y protección de datos de los ciudadanos europeos", el Parlamento Europeo ha dado su visto bueno a transferir a EE.UU. los datos personales de los pasajeros que recogen las compañías aéreas durante el proceso de reserva y que se almacenan en un registro conocido por Passenger Name Record (PNR).
Entre los datos que el Parlamento Europeo permite que sean cedidos o transferidos a EE.UU. se incluyen el nombre del pasajero, su domicilio, el número de teléfono, detalles de la tarjeta de crédito, información sobre el equipaje, viajes/escalas y otros indirectos que se "evidencian" de la elección del menú en el avión (por motivos religiosos) o cualquier petición personal de asistencia médica.
El resultado de la votación que autoriza que los datos privados de los pasajeros europeos sean remitidos por defecto al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en sus siglas en inglés), ha sido de 409 votos a favor, 226 en contra y 33 abstenciones.
Los partidarios del convenio con EE.UU. se amparan en que la cesión de datos se enmarca en la lucha contra el terrorismo pero los datos se pueden utilizar, así lo han querido los eurodiputados socialistas y populares, para investigar cualquier delito castigado con al menos tres años de cárcel por la legislación estadounidense y para "identificar" a cualquier pasajero que sea sometido a un interrogatorio a su llegada o salida de Estados Unidos.
Los defensores del convenio explican que "los datos más íntimos o sensibles" se almacenarán un máximo de 30 días antes de ser "borrados" - eso dicen - y otros (nombre/domicilio del pasajero) serán "despersonalizados", se codificarán a los seis meses. Es entonces cuando puedes preguntar a los defensores de la cesión de datos por "el descodificador" que naturalmente es el propio Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos. Es probable que les hayan engañado, otra vez.
La cesión de datos ha contado con el respaldo del Partido Popular Europeo (PPE) y de la mayoría de los eurodiputados del Grupo Socialista (S&D). La gran mayoría de los liberales (ALDE) han votado en contra y denunciado que el convenio con EE.UU. convierte a los ciudadanos europeos en sospechosos de terrorismo. Los Verdes/Alianza Libre Europea (Greens/ALE) y la Izquierda Unitaria (GUE/NGL) se han opuesto y han intentado llevar el acuerdo, sin éxito, al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE).
El presidente de la delegación socialista española, Juan Fernando López Aguilar, ha explicado en el debate que votaría a favor pues "la alternativa dejaría a los ciudadanos con menos garantías". El eurodiputado español Agustín Díaz de Mera (PP) ha defendido el voto a favor de los conservadores españoles con el siguiente argumento:
Tenemos dos opciones: votar a favor y conseguir mejoras para la privacidad de los ciudadanos o votar en contra y enzarzarnos en la negociación de un sinfín de acuerdos bilaterales
El embajador de EE UU ante la UE, William Kennard, quien en los últimos meses se ha reunido con un gran número de eurodiputados, se ha felicitado por la votación.
Foto | mmeida En Nación Red | EE.UU. más cerca de hacerse con los datos personales de los pasajeros europeos