IU-ICV intentó devolver la LES a los corrales (David Ballota, dixit) pero no hacía referencia en su enmienda a la totalidad a la denominada Ley Sinde. Algo que generó cierta incertudumbre y confusión. Pero las cosas ya están muy claras e IU no defrauda.
Sus enmiendas (pdf) parciales a la Disposición final segunda son un disparo a la línea de flotación del atropello de Sinde. A diferencia del PP los de Cayo Lara y Herrera cuestionan, por ejemplo, el peligroso concepto que autoriza a cerrar webs de "quien pretenda causar un daño patrimonial".
Sin duda nos enfrentamos a una nueva dimensión en la que los de la Comisión se llevan la bola de cristal al juzgado para decirle al juez, "mire en la bola y vea como fulanito, ese estudiante bellaco, dentro de unos meses causará daño patrimonial". Esto ya parece El Jueves.
Y esto es lo que han apoyado o al menos dejado pasar, digan ahora lo que digan, el PNV y CC. Y ojo con ERC que no rechazó la LES a pesar de llevar en su seno este concepto aberrante que tritura lo esencial del Estado de Derecho (democrático, garantista y de progreso). En cambio, nada que reprochar a IU que ha presentado enmiendas parciales, convencida de que la de supresión no recibirá casi apoyos.
Pero aquí está, aunque sea derrotada, la enmienda de supresión presentada con el sello de Izquierda Unida-ICV. Las cosas claras: Los de Cayo Lara, Herrera y Llamazares van de frente a por "la Sinde" y hacen honor al Manifiesto.
ENMIENDA De supresión A la disposición final segunda Se suprime la disposición final segunda. MOTIVACIÓN: Esta disposición pretende modificar, entre otras, la Ley de Propiedad Intelectual. En la conclusión nº 22 de la Subcomisión creada en el seno de la Comisión de Cultura sobre la reforma de la Ley 23/2006, de 7 de julio, por la que se modifica el texto Refundido de la Ley de Propiedad Intelectual, se instaba al Gobierno a que, en la actual Legislatura, se presente una revisión sistemática y coherente de dicha Ley, o a la elaboración de una nueva si fuera necesario, que ofrezca soluciones a los principales problemas detectados. El Gobierno opta, sin embargo, por introducir modificaciones parciales en esta materia en el Proyecto de Ley de Economía Sostenible, lejos de lo que puede entenderse por una revisión sistemática y coherente de la Ley de Propiedad Intelectual, y sin la tramitación parlamentaria que merece la cuestión a través de un Proyecto de Ley con sustantividad propia. En todo caso, el derecho de autor es necesario para garantizar la creación cultural y la autonomía creativa, pero no puede entrar en contraposición con los derechos ciudadanos y de acceso a la cultura. Algunas de las propuestas que el Gobierno introduce en esta disposición final segunda, que afectan a la gestión de la propiedad intelectual, pueden vulnerar derechos fundamentales, como lo son el derecho a la libertad de expresión y a la información.
Foto | Izquierda Unida