Interesante editorial, ayer, en El País bajo el título "El precio de Internet". En la misma el diario de la familia Polanco hace una reflexión sobre la polémica de las "tarifas" generada por las declaraciones del consejero delegado de Telefónica, luego rectificadas por el número uno de la filial española, que apuntaban al final de la tarifa plana.
Queda "claro", por lo tanto, que Julio Linares, mano derecha de César Alierta, se refería al Internet Móvil, aunque nadie le entendió ni probablemente le entienda todavía... más que nada porque no existen tarifas planas dignas de tal nombre en la oferta móvil de Internet.
Volviendo a PRISA. Dice El País en su editorial que "hay dos polémicas persistentes en Internet que afectan a la base del sistema: la neutralidad en la Red y las tarifas. Dos asuntos que, a veces, se confunden a pesar de no ser lo mismo". (?)
Pero lo que nos ha parecido más interesante es el párrafo en el que el editorialista del grupo PRISA da por hecho que el gobierno cumplirá su promesa:
La migración del internauta de las redes fijas a las móviles y el volumen de tráfico que acabarán exigiendo las aplicaciones audiovisuales en el teléfono o las tabletas pedirá una robustez inédita de las infraestructuras inalámbricas. De hecho, las operadoras aplican una tarifa ondulada que penaliza, con menos velocidad, a quien supere cierto umbral de tráfico. En este escenario es necesario respetar el acceso universal a Internet, que, por ley, en España será un derecho el año próximo, aunque sea con una humilde velocidad de un mega.
Fe es creer en lo que no se ve hasta que lo publica el BOE.
En Nación Red | Neutralidad de la Red, del telégrafo a la banda ancha... ¿y a la tarifa plana? Foto | Uriondo
