La feria tecnológica del CES, que se celebra estos días en Las Vegas, no solo es una oportunidad de renovar el escaparate de la obsolescencia programada y de ofrecernos a los medios tecnológicos una carnaza de píxeles y megahercios sino que se ha aprovechado, en un ámbito más reservado, para iniciar un encuentro para buscar alguna suerte de compromiso en el eterno litigio de las patentes.
El congresista Peter DeFazio, ha aprovechado la posibilidad de encontrarse con varios de los agentes de este conflicto para volver a presentarles su propuesta de ley, denominada SHIELD (escudo) para limitar las prácticas de los denominados Trolls de las patentes, que pretende modificar para volver a presentarla en el congreso estadounidense.
Una de las características más destacadas de este proyecto de ley, es el de identificar en los procesos judiciales a estos Trolls del copyright, lo que supondría que las costa del juicio, si persisten en él, serían cargadas a estos, además de tener la obligación de depositar una fianza previa, medidas destinadas a restringir las demandas por infracción de patentes por parte de compañías “fantasma” que luego desaparecen o creadas expresamente con el fin único del litigio.
Los juicios por infracciones de supuestos derechos están llevando en EEUU a una auténtica vorágine legal que está obstaculizando el desarrollo de muchos proyectos, sobre todo por el complicado entramado de procesos que estos entes de extorsión legal promueven. El debate público ha madurado en este sentido dado que no se trata solamente de grandes patentes de compañías de dimensión
Suzanne Michel, abogado de patentes de Google, asegura que los Trolls de patentes constituyen en la actualidad el 61 por ciento de todos los litigios sobre patentes, con unos costes legales directos anuales de 29.000 millones de Dólares anuales.
Vía | Arstechnica
Foto | Dunechaser