Microsoft siempre ha animado a los usuarios de Windows 10 a usar cuentas Microsoft (es decir, las que requieren loguearse en microsoft.com) en lugar de meras cuentas locales, propias de versiones anteriores de Windows. En el último año, de hecho, los usuarios estadounidenses que instalaban Windows 10 desde cero en sus equipos sólo tenían la opción de crear cuentas locales si desconectaban sus ordenadores de Internet.
Pero la compañía ha decidido dar un paso más en ese sentido: ahora, aunque la instalación se lleve a cabo sin Internet, volverá a pedir que se configure una cuenta Microsoft cuando el equipo recupere su conexión. Y lo que es peor: la voz de alarma la han dado usuarios alemanes, por lo que ya no se trata de una prueba aleatoria restringida a los EE.UU..
Cuentas Microsoft: ventajas, inconvenientes y trucos
Por un lado, es cierto que las cuentas Microsoft proporcionan ciertas ventajas a los sistemas Windows, relativas sobre todo a la sincronización de configuraciones y preferencias entre múltiples equipos, y a la posibilidad de recuperar la contraseña desde la nube.
Pero, por otro lado, obligar a los usuarios a utilizar un determinado servicio online para usar sus sistemas operativos podría desencadenar la polémica si se convirtiese en algo generalizado a partir de ahora. No sólo es una opción que resta privacidad: también está más expuesto a hackeos y bugs que impidan iniciar nuestros equipos (como ya ocurrió con Windows 8.1).
Queda, al menos, la tranquilidad de pensar que esta exigencia afecta únicamente a la primera cuenta de usuario que se crea durante la instalación, pero que por ahora seremos libres de crear una segunda cuenta de usuario en local y borrar posteriormente la primera.
De hecho, aún existen trucos que permiten, incluso, prescindir de las cuentas Microsoft a la hora de inscribir nuestro Windows 10 en el programa Insider que nos permite usar gratis Windows 10 a cambio de probar versiones de prueba del sistema operativo.
Vía | Dr. Windows
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