Netflix y Black Mirror han sabido acabar el año causando mucha expectación entre los usuarios de la plataforma, lanzando una producción interactiva (Black Mirror: Bandersnatch) que recuerda a los libros y juegos de elige tu propia aventura.
Vamos a intentar evitar spoilers para aquellos que todavía no la hayan visto, pero podemos decir que Bandersnatch gira en torno al desarrollo de videojuegos en la década de los años 80.
Juégalo en un ZX Spectrum real
Stefan Butler es el joven que protagoniza esta historia, y se despierta un día con la idea de llevar a cabo su sueño: llevarle a Tuckersoft (una compañía ficticia que aparece en el episodio) un videojuego creado por él.
La campaña promocional de esta producción estuvo rodeada de rumores y finalmente se confirmó que se trataba de un episodio interactivo. De todos modos, Netflix ha querido llevarlo un paso más lejos y realmente existe un videojuego nacido en Bandersnatch al que podemos jugar.
Si visitamos la página de Tuckersoft (recordamos que es la compañía ficticia que aparece en el episodio) podemos ver las portadas de los juegos que han desarrollado, con un arte que nos teletransporta a la era de Atari en los 80s.
Haciendo click sobre cada una de las portadas podremos conocer información acerca de cada uno de estos juegos ficticios y ver algunas capturas. Lo mejor de todo es que podremos descargar uno de estos juegos.
Si hacemos click sobre el enlace de 'Nohzdyve' (un juego que supuestamente ha creado uno de los personajes del episodio) veremos un botón en el que se puede descargar el archivo del juego. Lo mejor de todo es que está pensado para ser ejecutado en un ZX Spectrum: pasando el audio a casete o utilizando un emulador.
"Juega Nohzdyve en tu emulador ZX Spectrum. Advertencia: puedes volverte adicto a aumentar tu puntuación".
La mecánica es muy sencilla: vamos cayendo entre dos edificios mientras tenemos que ir esquivando los obstáculos que van apareciendo e intentamos recoger objetos para mejorar la puntuación.
Puede que en 2018 no suene al juego más atractivo del año, pero lo cierto es que estamos ante una de las campañas de marketing más ingeniosas de la historia de Netflix.