Una de las facetas más destacadas dela ciberseguridad es la creación y el manejo de contraseñas: según recientes estudios, un alarmante 90% de las contraseñas son vulnerables a ciberataques a causa de nuestro uso de claves débiles y predecibles, como "12345" o "password". Además, muchos usuarios van dejando por ahí sus contraseñas apuntadas.
Esto no es solo un arriesgado ejercicio de negligencia: es una consecuencia de la preferencia por lo recordable ante la sobrecarga de información, pues cada nueva cuenta online que creamos exige una nueva combinación de nombre de usuario y contraseña.
Pero, actuando así, no hacemos sino poner en peligro toda nuestra vida digital, pues le estamos simplificando el trabajo de los ciberdelincuentes, quienes recurren a programas automatizados capaces de probar a gran velocidad las combinaciones más comunes.
Además de las contraseñas de este TOP5, los datos publicados por NordPass complementan este ranking con otras como "1234567890", "mallorca64", "barcelona" y "000000".
Consejos para generar contraseñas más seguras
El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) sugiere crear contraseñas:
- No muy cortas: Deben contar con al menos 8 caracteres.
- Complejas: Que combinen mayúsculas, minúsculas, números y símbolos y eviten palabras obvias o secuencias numéricas simples.
- Que no incluyan información personal (deducible por cualquiera que cuente con información sobre nosotros). Así que nada de fechas de cumpleaños, nombres de hijos o de mascotas, etc.
- Que no recurran a patrones basados en el teclado ('QWERTY', ¿en serio?) o en frases muy populares.
Así, una técnica efectiva para crear contraseñas seguras es utilizar frases memorables (pero sólo para nosotros) y luego convertirlas en una combinación de letras, números y símbolos.
Por ejemplo, si la frase "Soy Bond, James Bond" no fuera conocida por media Humanidad, podría haber sido una buena base para una contraseña... siempre y cuando el agente 007 la convirtiera en algo tipo "s0y.B0nd+J4m3s_BOND!".
Consejos para salvaguardar la seguridad de nuestras contraseñas
- No compartas contraseñas: Esto debe ser entendido en dos sentidos: primero, nunca compartas tus contraseñas con nadie (ni siquiera con amigos o familiares); segundo, nada de reciclarlas (cada cuenta debe tener su propia contraseña única).
- Cambio periódico: Cambia tus contraseñas regularmente, al menos cada tres a seis meses. Si sospechas que una contraseña ha sido comprometida, cámbiala de inmediato.
- Gestores de contraseñas: Los gestores de contraseñas son herramientas fundamentales en la actualidad. Permiten almacenar de manera segura múltiples contraseñas, accesibles a través de una clave maestra. Estos servicios, además de ofrecer almacenamiento cifrado, pueden generar contraseñas robustas, e incluso renovarlas periódicamente.
- Verificación en dos pasos: Activa la verificación en dos pasos siempre que sea posible. Esto agrega una capa adicional de seguridad al requerir un código de verificación adicional para acceder a tu cuenta.
Imagen principal | Marcos Merino mediante IA
Imágenes | INCIBE
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