¿Os acordáis del absoluto desastre que fue intentar ver los partidos de la Champions a través de la plataforma Total Channel y BeIn Sports? Representó el apoteosis de los fallos de streaming cuando demasiados usuarios quieren ver una misma retransmisión, y dejó claro que se necesitaba un cambio fuerte en el modo de ofrecer estos directos con tanta audiencia.
Y parece que en BeIn Sports lo han entendido, porque han recurrido a uno de los servicios más capaces de emitir vídeo en directo para una gran cantidad de personas: YouTube. Ahora este servicio se convierte en un canal de pago dentro del servicio de vídeos de Google, con un coste de 9,99 euros mensuales.
A cambio de esa cuota, los usuarios podrán ver todos los partidos que ofrezca BeIn Sports con la solidez de YouTube y sin ningún tipo de anuncio. La compatibilidad se aclara: allá donde se puedan ver vídeos de YouTube se podrá ver BeIn Sports. Móviles, tabletas, cualquier navegador moderno y unos 5 millones de televisores inteligentes en España.
Las ventajas son evidentes, aunque claro: ahora YouTube se lleva una parte del pastel por cargar con todos los costes de streaming y garantizar que no haya cortes. Pero a grandes problemas, grandes soluciones. YouTube es ahora mismo la mejor plataforma para vídeos con grandes audiencias y en beIn Sports no deben haber tenido más remedio para evitar otro desastre bochornoso con sus servicios.
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