Smartick Lectura es el nuevo programa del proyecto de aprendizaje online para niños que dos andaluces pusieron en marcha ya hace más de 10 años. El método Smartick para el aprendizaje de matemáticas ya es bastante conocido, y sabemos que funciona. El nuevo reto ahora es mejorar la compresión lectora.
La idea es que a través del programa los niños entre 4 y 14 años no solo aprendan a leer, reconociendo letras y textos complejos, sino que lo hagan de manera precisa y fluida, y que además comprendan lo que leen.
Diseñado para que los niños trabajen sin la ayuda de los padres
Al igual que el programa de matemáticas, Smartick Lectura está diseñado para que el niño trabaje por su cuenta, solo 15 minutos al día sin la ayuda de sus padres. Estos solo tienen que registrar a los niños como estudiantes y pueden utilizar el periodo gratuito de 7 días directamente sin necesidad de ingresar ningún método de pago.
Solo es cuestión de responder algunas preguntas clave durante el registro, como la edad y si el niño tiene alguna necesidad educativa especial. Con esta información Smartick plantea una prueba para el alumno para determinar el punto de partida y adaptar los ejercicios según sus conocimientos y necesidades.
Esto lo hace aprovechando la inteligencia artificial, gracias al algoritmo que usa el sistema, el programa se va adaptando a cada niño en particular para que este aprenda al ritmo más adecuado para él.
Desde la Web de Padres se puede después revisar las tarifas que varían según número de alumnos y tipos de suscripción.
Precisión, velocidad, entonación y compresión lectora
El programa de Smartick Lectura está enfocado en potenciar cuatro componentes principales:
- Que los niños puedan leer cualquier palabra, conocida o desconocida, sin cometer errores.
- Que puedan leer cualquier palabra de manera correcta a la velocidad que corresponda a su edad.
- Que puedan leer cualquier palabra o frase con la entonación adecuada.
- Que puedan conseguir comprender el mensaje de las oraciones y textos escritos.
Para esto cuenta con tutoriales interactivos con una capa de gamificación: los niños aprenden jugando. Los alumnos son evaluados en tiempo real y los padres pueden hacer un seguimiento de las sesiones gracias a los informes inmediatos de resultados obtenidos.
Los niños tendrán un avatar que vive en una habitación que van amueblando conforme ganan ticks (premios) en cada sesión. Cuando las sesiones de aprendizaje finalizan, pueden acceder a un mundo virtual en el que hay juegos diseñados científicamente para potenciar habilidades cognitivas como la atención, la memoria y la concentración.
El proceso es dinámico y divertido y se siente como un videojuego. Las sesiones son cortas y es más fácil mantener la atención del estudiante. La gente de Smartick ha pasado los últimos dos años intentando replicar su exitoso método con las matemáticas, y su programa de lectura pinta definitivamente muy bien.