Elon Musk lleva pocos días dirigiendo Twitter, tras mucho tiempo desde que lo anunciase y con problemas legales entre medias. Desde su llegada a la plataforma no ha hecho más que anunciar drásticos cambios. Uno de ellos la idea de cobrar 20 dólares por verificar las cuentas.
Una persona muy reconocida, Stephen King, se ha quejado. Y esas quejas han derivado en dejar el coste de la verificación en 8 dólares. Lo que dijo el escritor fue: "¿20 dólares al mes por mantener mi tick azul? ¡Que le den, deberían pagarme a mi! Si eso se instituye, me iré como Enron".
$20 a month to keep my blue check? Fuck that, they should pay me. If that gets instituted, I’m gone like Enron.
— Stephen King (@StephenKing) October 31, 2022
Lo mejor es que, tras esto, Musk comenzó con un regateo: "¡Tenemos que pagar las facturas de alguna manera! Twitter no puede depender completamente de los anunciantes. ¿Qué tal 8 dólares?". El magnate dice que es una forma de derrotar a los bots de la plataforma, que él ve como gran problema.
We need to pay the bills somehow! Twitter cannot rely entirely on advertisers. How about $8?
— Elon Musk (@elonmusk) November 1, 2022
Además, ha advertido, a todos los que se quejan, que sí o sí costará 8 dólares.
Este Twitter para verificar mensajes también ofrecerá, según Musk, prioridad en las respuestas, menciones y búsquedas, lo cual es esencial para evitar el spam o las estafas. También la posibilidad de enviar mensajes largos y vídeos más largos. También la mitad de los anuncios que recibimos ahora.
Huída masiva a Mastodon
King no sería el único en irse. Elon Musk ha hecho que muchos tuiteros dejen esta plataforma y se hayan decantado por Mastodon o Discord, red social que registró un pico extremo de usuarios tras la compra de Twitter.
De acuerdo con Wired, solamente entre el 20 y el 27 de octubre, se inscribieron unas 18,000 personas en Mastodon, y al 28 de octubre se contabilizaban 381,113 usuarios, según Eugen Rochko, director general de la plataforma.
El movimiento comenzó a tomar fuerza apenas horas después de la noticia de la adquisición, generando tendencias en Twitter con #TwitterMigration, en previsión a que se dieran cambios radicales en la nueva red social de Musk. Incluso hay gente que teme que la "libertad de expresión" de la que Musk habla derive en permitir discursos de odio o publicaciones que ataquen a colectivos atacados también en la vida real como pueden ser migrantes o personas LGBTIQ+.
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