Martin Gottesfeld es un hombre de 34 años que vive en Massachusetts y que acaba de ser condenado a 10 años de prisión tras haber lanzado un ataque DDoS a un hospital infantil en el año 2014.
Gottesfeld lo hizo en nombre del colectivo de hackers Anonymous, y los ataques eran parte de #OpJustina: una campaña con la que Anonymous buscaba dar soporte al caso de la joven Justina Pelletier.
"Ojalá hubiera podido hacer más"
Según los fiscales, a finales de 2013, este ingeniero informático se enteró de la disputa que tenían dos padres por la custodia de su hija (Justina Pelletier). Finalmente acabaron separando a la niña de sus padres, tras el diagnóstico realizado por el hospital infantil de Boston.
Dicha entidad determinó que sus problemas de salud eran de naturaleza psiquiátrica y que sus padres estaban interfiriendo con su tratamiento. Este caso acabó llamando la atención de políticos y grupos religiosos que lo consideraron un claro ejemplo de interferencia del Gobierno sobre los derechos de los padres.
Gottesfeld tampoco estaba de acuerdo con el diagnóstico del hospital y acabó lanzando un ataque DDoS contra una instalación de tratamiento residencial llamada Wayside Youth & Family Support Network (Red de Apoyo a Jóvenes y Familias de Wayside), en la que Pelletier residió después de ser dada de alta en el hospital.
Un año después se determinó que los médicos habían hecho un mal diagnóstico de la condición de Justina Pelletier, y finalmente la joven pudo volverse a reunir con sus padres.
Además de a 10 años de prisión, los fiscales le han condenado a pagar una multa de 443.000 dólares. El hacker afirma que recurrirá esta sentencia y que no siente remordimientos de haberlo hecho:
"Ojalá hubiera podido hacer más".
El juez encargado del caso, Nathaniel Gorton, tiene una visión diferente de lo sucedido, y en el juicio le espetó lo siguiente: "no te equivoques, tu crimen fue despreciable, injusto y repugnante".
Los ataques DDoS hicieron que el hospital infantil de Boston se estuviera desconectado durante varios días, y las autoridades dijeron que interrumpieron las operaciones diarias del hospital y su capacidad de investigación.
¿Cómo consiguieron encontrarlo? La historia también es bastante llamativa en este aspecto. Las autoridades rastrearon a Gottesfeld gracias a un vídeo que el hacker había subido a YouTube, pero cuando fueron a registrar su casa (en 2014) no le encontraron.
Gottesfeld intentó huir a Cuba en un barco alquilado, pero el viaje se le complicó. Tuvo que pedir auxilio en el Golfo de México y un barco de Disney respondió a su llamada de SOS y lo trajo de vuelta a los Estados Unidos.
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