En la serie de reacciones ante el pacto PP-PSOE por la Ley Sinde que hemos estado analizando, hay una que se merece un puesto especial. Por su extraña procedencia, el Vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Esteban González Pons y por lo contradictoria que resulta.
Un portavoz debería hablar por su partido, pero Pons hace justo lo contrario. Mientras el partido al que pertenece pacta con el PSOE una ley completamente impopular, él se dedica a negar la legitimidad de ésa misma Ley. ¿Qué está pasando aquí? ¿Engaño? ¿División de opiniones?. Lo que está claro es que resulta insultante para sus votantes. Porque entre lo que dice y lo que hace su partido hay una diferencia tan radical que o bien no cree en lo que dice o su partido no cree en él.
Sí, un galimatías que suena a un especie de Rodríguez Ibarra pero en “colocao”, vamos que Pons sigue cobrando del partido y del Congreso mientras le dejan ir de verso suelto porque es una ‘cara bonita’ que mostrar a los medios y al público. Lo que tenemos que aguantar.
El responsable de comunicación del PP si creyese realmente en la libertad de Internet y en su importancia, como dice, habría hecho hoy como Álex de la Iglesia. Mientras tanto, otras personas implicadas mucho menos que él (por ser quien es) en éste pacto deciden dimitir; dando muestras de una coherencia y dignidad poco comunes en nuestro país.
