Abre la aplicación de mensajería y pide ayuda: -me gustaría ponerme en forma, ¿puedes conseguirme un buen entrenador personal?-. La respuesta no se hace esperar: –hecho, ¿dónde lo necesitas? ¿Cuánto quieres gastarte?- . La conversación no tarda en dar resultados, y al poco tiempo, ha contratado lo que buscaba. Sorprendido, comprueba una vez más que no hablaba con uno de sus amigos, sino con un software más avanzado de lo que hubiera podido imaginar.
Si bien los asistentes digitales y las apps específicas que te ayudan en las tareas del hogar no son nada nuevo, lo cierto es que un producto similar parece estar calando entre los grandes gigantes tecnológicos. Se trata de los mayordomos virtuales contextuales, unas herramientas que se valen, como su propio nombre indica, de toda la información del contexto para mejorar los resultados. Unos bots que incluso se cuelan en las apps tremendamente populares.
El caso de Line
La última en subirse al carro ha sido Line que, según acaba de anunciar Tech Crunch, estaría a punto de lanzar el suyo propio en Tailandia, el mayor de sus mercados, donde se encuentra el 65% de su actividad. Un sistema que permitirá a los usuarios solicitar cualquier artículo o servicio (con una pequeña comisión) y que podría aprovechar los servicios de música, vídeos y reserva de taxis que actualmente ya tiene la compañía asiática.
Aunque todavía no conocemos demasiados detalles al respecto, la iniciativa pretende emular prácticamente, de manera idéntica- el funcionamiento de Magic, una startup estadounidense que comparte el mismo propósito pero que opera mediante sms (gratuitos en este territorio). De funcionar, podría expandirse próximamente a otros países del globo, pero tendremos que esperar los resultados tras su puesta en marcha.
Otros mayordomos virtuales
Al margen de la citada compañía, lo cierto es que su apuesta no es única. De hecho, este mismo verano supimos de la existencia de Yexir, un asistente virtual made in Spain capaz de reservarte una habitación de hotel, hacerte la compra, enviar una cena al trabajo, programarte las vacaciones y un largo etcétera; todo a través de WhatsApp. Una especie de genio de la lámpara maravillosa 3.0 al que se le puede pedir casi cualquier cosa.
“La idea es que Yexir solo necesita que el cliente diga qué necesita por WhatsApp para buscar instantáneamente en cientos de bases de datos y proveedores, comparar opiniones y enviar un mensajero a por tu cena. Todo a velocidad de vértigo y con una sencillez casi mágica”, comentan sus desarrolladores.
Incluso puede, por ejemplo, encontrarte un inquilino para el piso que quieres alquilar, un entrenador personal y llevar a cabo casi todo tipo de peticiones. Su gestión (subcontrata), evidentemente implica una comisión que ronda entre el 4% y el 10% del importe del producto, un importe que se abona mediante Stripe, la misma plataforma que usan Kickstarter, Lyft y Pinterest).
Dispatch y Humin, también pueden considerarse como mayordomos virtuales. Con esta primera, además, podrás comprar el producto que buscas con solo enviarle una fotografía. Las entregas se realizan en una hora pero, eso sí, se centra en Londres. Respecto a Humin, más que a servicios, está enfocada a que te acuerdes de todo (sí, como ese asistente perfecto que desearía todo político). Así, recaba toda la información sobre una persona que acabas de conocer y otra sobre, por ejemplo, cómo se llama la mujer de tu jefe.
Asimismo, el mes pasado, el propio Zuckerberg anunció que estaba trabajando en un proyecto similar; un asistente que nos prestará soporte a la hora de llevar a cabo las tareas del hogar, pero que también nos facilitará, por ejemplo, la toma de decisiones en el entorno laboral. Una suerte de “Jarvis de Iron Man” que le “ayudará a liderar sus organizaciones con mayor efectividad” y que, en este caso, contará con un soporte físico (a diferencia de las anteriores).
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