Bill Gates tiene una habilidad que ha sido clave en su éxito empresarial: considerar el mejor y el peor escenario

En el equilibrio entre ponerse en lo peor y lo mejor a corto y medio plazo está la auténtica virtud

Bill
3 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Hay pocas personas tan influyentes en el sector de la tecnología como Bill Gates en las últimas décadas. Pese a alcanzar el éxito más absoluto con la hegemonía incuestionable de Windows y construir todo un imperio con Microsoft, Gates también cuenta en su haber con estrepitosos fracasos.  En su travesía hasta la cima, Bill Gates ha ido depurando sus hábitos: de pasar a ser un adicto al trabajo y al buscaminas a aplicar la regla de las cinco horas para mejorar su productividad.

Entre ellos, algunos que tienen que ver con su vestuario o con la lectura. Pero si hay uno que ha determinado su devenir ante la adversidad en lo profesional y en la vida, ese ha sido seguir una máxima: prepárate para lo peor, alégrate de lo mejor.

Lo que lleva al éxito es el equilibrio entre pesimismo y optimismo y Bill Gates lo sabe bien

Cuenta el escritor Morgan Housel en su libro ‘Lo que nunca cambia’, Bill Gates tiene la habilidad para prepararse para lo mejor y lo peor, para las dos caras de la moneda. De hecho, las predicciones del fundador de Microsoft son toda una referencia, especialmente en lo relativo a la inteligencia artificial por su alta tasa de acierto, algo que ya pudimos observar en 2023 y que le han convertido en más optimista, al menos en esta materia.

El autor detalla dos cualidades y sus consecuencias: las personas optimistas puras piensan que todo va a salir bien y se toman lo de ser negativo como un defecto. Para Housel, esta característica denota un exceso de ego: esta gente tiene tanta confianza en sí misma que solo consideran el éxito. En el otro lado de la balanza están las personas absolutamente pesimistas. Para este tipo de gente todo va a salir mal y es terrible y contemplan la positividad como falta de realismo. Nuevamente el ego vuelve a la palestra: se trata de una cuestión de escasez de confianza en la que nada va a salir como quieren.

Pues bien, Bill Gates sabe que en el equilibrio está la virtud y así lo ha demostrado cuando le han preguntado.

En una entrevista en el programa de Ellen DeGeneres de 2017, el magnate explicaba que 'Siempre estuve preocupado porque las personas que trabajaban para mí eran mayores que yo y tenían hijos, y siempre pensaba: ¿Qué pasa si no nos pagan? ¿Podré hacer frente a la nómina?'

Por este motivo siempre veló por tener un fondo de emergencia con dinero suficiente como para acometer el pago de las nóminas de la plantilla de Microsoft durante por lo menos un año, incluso aunque no tuviera ingresos.

El año anterior dejó ver lo bien que se movía entre lo mejor y lo peor, concretamente en esta entrevista de 1996 donde se mostraba optimista con el lanzamiento de Windows 95 mientras recalcaba las dificultades de su empresa '[…] es un desafío que debemos asumir para mantener el crecimiento y seguir haciendo cosas nuevas, pero no veo espacio para la complacencia aquí. Veo una inmensa oportunidad, así que lo único que me preocupa es la complacencia. Creo que ese es nuestro mayor enemigo'.

El escritor detalla que Bill Gates se ajusta al concepto 'Optimismo racional', descrito por Matt Ridley en su libro homónimo y que hace referencia a que estas personas consideran la vida como una consecución de problemas, decepciones e inconvenientes, pero eso no es obstáculo para avanzar y progresar.

De su liderazgo en una de las mayores empresas tecnológicas del planeta, Bill Gates ha aprendido que solo puede ser optimista a largo plazo si en el corto plazo es moderadamente pesimista como para estar al acecho y superar inconvenientes y problemas del día a día. En pocas palabras, el millonario tiene listo un colchón financiero suficiente como para arriesgarse a corto plazo, pudiendo así mitigar el impacto de una mala decisión. Esto es extrapolable a cualquier aspecto vital.

Como remata Morgan Housel en una entrevista para CNBC, lo que lleva al éxito es el equilibrio entre pesimismo y optimismo: 'ahorra como un pesimista e invierte como un optimista. Hay un momento y un lugar para ambos y deben coexistir'.

Vía | Xataka

Portada | Flickr (Chris Boland)

En Genbeta | Las predicciones de Bill Gates ya se están cumpliendo en 2024. Al menos en Inteligencia Artificial

Comentarios cerrados
Inicio