Si eres usuario de Instagram o Facebook Messenger como millones de personas en Europa, es probable que te hayas encontrado con un nuevo mensaje de advertencia informando sobre algunas funciones que no están disponibles.
También probable que no tengas mucha idea de exactamente qué funciones te estás perdiendo, ni en qué está trabajando Facebook para que puedas volver a usar. Se trata, cómo explica la empresa, de cambios en los servicios de mensajería de Facebook en la Unión Europea.
El Reglamento ePrivacy
En 2017 la Comisión Europea propuso un nuevo reglamento para la privacidad y las comunicaciones electrónicas, su objetivo era poner las normas al día con la GDPR. Y tras años de negociaciones sobre el texto definitivo, la directiva entra en vigor ahora y viene a viene a sustituir la ley de cookies aprobada en 2002.
La normativa afecta directamente a los servicios de mensajería y limita las formas en las que las empresas pueden usar los datos de los chats y llamadas. Es por ello que Facebook dice estar "ajustando cómo funcionan sus servicios para cumplir con la ley".
Tienen que hacer cosas como separar más los datos de mensajería de otras partes de su infraestructura. Por ahora las funciones básicas y más importantes como la mensajería de texto y los llamadas son la prioridad y están disponibles, sin embargo explican que "funciones avanzadas como las encuestas podrían verse interrumpidas mientras hacen cambios para ponerse en línea con las nuevas reglas de privacidad".
El nuevo Reglamento de Privacidad y Comunicaciones electrónicas viene a cambiar cómo las empresas solicitan consentimiento a la hora de realizar seguimiento del usuario y establecer cookies, haciendo hincapié en el que el usuario debe consentir a través de una acción clara y afirmativa, y por ello los meros banners para aceptar cookies dejan de tener sentido y al fin los veremos comenzar a desaparecer.
El reglamento ePrivacy también prohíbe la vigilancia de las comunicaciones y la recolección de metadatos sin consentimiento explícito de los involucrados. También prohíbe que los servicios de mensajería usen datos para prevenir, detectar y responder al material de abuso infantil y otras formas de daño.