Xavier Pladellorens, CEO y fundador de Deporvillage, ha anunciado que han vendido el 80% de la compañía a JDSports, y que, por lo tanto, el retailer catalán pasará a formar parte del mismo grupo que Sprinters, Jd Sports o Sonae.
Según Reuters, la operación se ha cerrado en 140,4 millones de euros, con la mira puesta en aumentar la presencia online y digital del grupo británico, pues es algo en lo que Deporvillage destaca, siendo, según el comunicado, "uno de los principales operadores online de material deportivo especializado en Europa".
En un año tan complicado como 2020, y tras 10 años de vida, Deporvillage logró facturar 117,8 millones de euros, con un beneficio antes de impuestos de 7,7 millones de euros.
Los fundadores de Deporvillage seguirán al frente de la compañía con un 20%
Tras meses de negociaciones, Xavier Pladellorens y Ángel Corcuera, fundadores y aún responsables de Deporvillage, continuarán al frente de las operaciones de la compañía una vez finalice la transacción. Además, según ha contado Pladellorens a El Confidencial, "no se pierde el nombre ni nada similar", sino que "son más acuerdos para que ambas partes sigan creciendo de forma independiente y fortaleciéndose".
JDSports ha realizado la adquisición a través de Iberian Sports Retail, compañía de la que posee el 50,02%. Con la compra, Iberian espera superar 900 millones de euros de facturación y dar empleo a más de 9.000 personas.
Deporvillage ganará mucha más visibilidad de la que ya tenía en running y ciclismo, y se asentará como uno de los líderes del sector. Pladellorens cree que la compra será beneficiosa porque JD no tiene dominio en estas categorías con marcas como Sprinter.
Miguel Mota, director de Iberian Sports, confía en que "su excelente equipo sumará sus capacidades y resultados a nuestro proyecto de ofrecer a los consumidores europeos la mejor experiencia de compra de equipamiento deportivo multimarca y omnicanal del mercado".
