El Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad ha solicitado a Twitter que aísle perfiles de usuarios que escriban mensajes que inciten a la anorexia, la bulimia u otros trastornos alimenticios. Leire Pajín, la titular del ministerio, asegura que ha pedido que se usen para ello “todos los mecanismos que estén en las manos” de la red social, siempre “respetando la libertad de expresión”.
Pajín afirma que la iniciativa ha surgido después de que varios usuarios de Twitter les han pedido, a través de la red, que actuasen ante la proliferación de cuentas con estas características. Por ello, el ministerio ha formulado una petición a través de la Unidad de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil. El gobierno hará una lista de usuarios sospechosos y rastreará la red social.
La ministra, además, ha añadido: “Las nuevas tecnologías y las redes sociales son una fabulosa herramienta de comunicación, pero también pueden usarse con objetivos nocivos para la sociedad y la salud de los ciudadanos”. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la publicación de los mensajes en cuestión no constituye un delito, con lo que la línea de legalidad para actuar es muy fina. No obstante, Pajín asegura que llevarán a cabo un rastreo periódico de Twitter.
Según afirman portavoces del ministerio, “la iniciativa ha tenido un recibimiento muy positivo” por parte de usuarios de la red social en cuestión. De hecho, algunos de ellos ya sugieren perfiles susceptibles de ser incorporados en las listas de vigilancia del gobierno.
Es evidente que los mensajes que incitan a la anorexia, la bulimia u otro cualquier comportamiento que pueda producir el deterioro de la salud de cualquier persona deben ser repudiados y eliminados de forma clara, no sólo por el gobierno, sino por la sociedad. Pero en medidas como la que llevará a cabo el Ministerio de Sanidad hay que andar con pies de plomo, puesto que en ocasiones la línea que separa el control de estos comportamientos y la censura es muy fina.
Vía | Europa Press
Foto | Chesi