El Financial Times "censuró" en el último momento el anuncio de Amnistía Internacional, que encabeza este post, en el que se denuncia la contaminación en el delta del Níger provocada por la petrolera Shell. El anuncio, que muestra una copa de champán llena de petróleo, debía haberse publicado el martes, el mismo día que la dirección de la compañía petrolera anunciaba 9.800 millones de dólares de beneficios en su junta general de accionistas.
El diario económico ha justificado su decisión aludiendo a los riesgos legales, aunque la ONG había prometido por escrito hacerse cargo de cualquier represalia. La decisión del periódico económico ha provocado la indignación de los activistas y simpatizantes en la red de Amnistía Internacional en el Reino Unido, que había hecho de las redes sociales la principal plataforma para recaudar dinero y poder publicar el anuncio de su enérgica campaña internacional contra Shell.
Desde Twitter, Facebook y MySpace se movilizaron miles de simpatizantes para recaudar 30.000 libras y contratar varios anuncios de periódico a página completa el pasado martes, 18 de mayo. El día de que tendría lugar la Asamblea General de la compañía Shell.
Los anuncios financiados con más de 2.000 contribuciones "on-line" no ha tenido el menor problema para publicarse en otros dos periódicos, como son el Evening Standard y Metro. Pero el impacto que se buscaba era publicarlo en el periódico económico más influyente, "prestigioso" y vendido del mundo. Una vez más, la censura ejercida, ha conseguido provocar el efecto altavoz. Ahora mismo la noticia es la "censura" del FT, lo que ha movilizado a muchos ciudadanos y medios digitales que están publicando espontáneamente el anuncio en blogs o redes sociales. Además, como decimos, la noticia, por el efecto altavoz, está llegando también a algunos medios tradicionales que relatan el motivo de la campaña de Amnistía Internacional aunque sea dando más prioridad a la "censura" del periódico salmón de referencia en los mercados.
Los responsables de Amnistía Internacional en el Reino Unido han afirmado que “dimos garantías por escrito de que nos hacíamos totalmente responsables de lo que aparecía en ese anuncio”, que está basado en un informe de 141 páginas (pdf). Los responsables del diario habían admitido el anuncio pero, ante la inminente Asamblea General de la compañía Shell en suelo británico, decidieron no publicarlo.
Más información | Amnistía Internacional (Blog Campaña Shell)
