Detrás de la IA más avanzada de China se encuentra una de las mentes jóvenes más brillantes del sector: esta es su historia

Yang Zhilin fundó Moonshot AI junto a sus compañeros de Universidad y ha sido coautor de múltiples investigaciones científicas sobre modelos de lenguaje

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Desde que ChatGPT puso a la industria tecnológica patas arriba, han sido muchas las empresas que han querido formar parte de esta revolución de la inteligencia artificial. A pesar de que OpenAI se encuentra a la vanguardia en este campo, China ha evolucionado considerablemente con modelos de lenguaje muy capaces en cuestión de unos pocos meses.

Entre las propuestas más destacadas del país se encuentra Moonshot AI, una de las startups más importantes sobre inteligencia artificial y que ya tiene un valor de mercado superior a los 3.300 millones de dólares. En su última ronda de financiación Tencent participó añadiendo 300 millones de dólares, aunque también hay otros gigantes que han aportado a que esta empresa crezca como Alibaba, según informa Bloomberg.

Así fue como surgió Moonshot AI, una de las empresas de IA más destacadas de China

Detrás de Moonshot AI se encuentra Yang Zhilin, un joven emprendedor de 31 años que ya desarrollaba modelos de lenguaje antes incluso de que OpenAI lanzara al público la primera versión de ChatGPT. Esta tecnología es fundamental a la hora de lanzar herramientas basadas en inteligencia artificial generativa.

Según afirma el medio South China Morning Post, ya en febrero Yang compartía su visión acerca de Moonshot AI, un modelo de negocio que combine el “idealismo tecnológico de OpenAI con la filosofía de negocio de ByteDance”.

Si bien Yang no es muy de entrevistas, los inversores le tienen fichado, por lo que es así como se ha dado a conocer su estelar trayectoria académica. Yang estudió informática y se doctoró en la prestigiosa Universidad Carnegie Mellon de Pensilvania tras licenciarse en la Universidad de Tsinghua. Durante sus estudios de doctorado trabajó en Meta y en Google Brain.

Durante sus años en los Estados Unidos, Yang fue coautor de numerosas publicaciones científicas sobre modelos de lenguaje de IA. Trabajó con grandes figuras del sector como Yann LeCun, científico jefe de IA en Meta, Quoc V Le, investigador en Google, o el experto informático canadiense Yoshua Bengio. Ya en esta época fue considerado como una de las mentes jóvenes más brillantes sobre modelos de lenguaje.

En 2020, Yang trabajó para Huawei en una versión preliminar del modelo de lenguaje de la firma: Pangu. Un año después, contribuyó al desarrollo del modelo de lenguaje Wudao en la Academia de Inteligencia Artificial de Pekín. Según explicó Yang a los medios de comunicación de China, estas colaboraciones permitieron a su equipo conocer desde el principio todos los problemas que puede plantear la creación de modelos de IA.

Después del lanzamiento de ChatGPT, Yang viajó a Estados Unidos en diciembre de 2022 para aprender más acerca de esta aplicación y reclutar talento para su propia empresa. Yang comentó que “era el momento de subirse a la ola de la inteligencia artificial generativa”.

Kimi Kimi AI, la herramienta de Moonshot AI similar a ChatGPT

Yang cofundó Moonshot AI junto a sus compañeros de clase de la Universidad de Tsinghua, Zhou Xinyu y Wu Yuxin en marzo del año pasado. La ronda de financiación inicial fue de unos 60 millones de dólares y reunió a un equipo de 40 especialistas en inteligencia artificial en los primeros tres meses de la compañía.

En octubre de 2023 lanzaron su herramienta de IA, la cual era similar a ChatGPT. La herramienta tiene el nombre de Kimi AI, la cual tuvimos la ocasión de probar hace un tiempo. Actualmente es una de las más destacadas de China, ya que entre sus características se encuentra la capacidad para procesar hasta dos millones de caracteres chinos.

Kimi 2 La censura es algo crucial para la supervivencia de los modelos de IA en China

Con el tiempo, la base de usuarios de Kimi AI ha crecido significativamente. Además, Yang considera que la ventana de contexto es superior a la de OpenAI en determinadas aplicaciones.

El nombre de la compañía (Moonshot AI) vino por su amor al rock clásico durante sus años de estudiante en la Universidad de Tsinghua, según comenta Yang. Allí formó una banda de música y durante una visita del medio South China Morning Post a sus oficinas, se podía ver colgado en la entrada el Dark Side of the Moon, el exitoso álbum de 1973 de Pink Floyd, justo encima de un piano digital blanco Yamaha.

Moonshot AI es una de las grandes esperanzas de China junto a los modelos de Qwen para hacer frente a las propuestas más destacadas del sector. Tendremos que esperar para conocer cómo se las ingenia el equipo de Yang para sobrevivir en esta industria tan competitiva.

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