Que Estados Unidos posee una de las inmigraciones más consolidadas del mundo es una realidad innegable que el crecimiento de la población y los numerosos cambios económicos y sociales se han encargado de plasmar a lo largo de los años. Un contexto al que ahora se suma un nuevo dato: más de la mitad de las startups del país que superan los mil millones de dólares han sido fundadas por inmigrantes.
Al menos así lo indica un nuevo estudio llevado a cabo por la Fundación Nacional para la Política Estadounidense , que estima que hasta el 51% de estas compañías han sido alumbradas de la mano de extranjeros. Un porcentaje nada desdeñable que pone en evidencia la situación de la industria tecnológica en el gigante norteamericano.
Qué dice el estudio
Además, esta investigación independiente -la organización es un centro de estudios no partidista ubicado en Virginia-ha revelado que se trata de 44 empresas que, combinando su valor, alcanzan los 168 mil millones. Una cifra que, por cierto, supone prácticamente la mitad del valor de las bolsas de países como Rusia o México.
Evidentemente, no es solo esto lo que importa sino que, según el documento, cada una de ellas genera una media de 760 puestos de trabajo, cuyos altos cargos ocupan, en más del 70% de las ocasiones, inmigrantes. Estos proceden de veinte países distintos. Por ejemplo, ocho nacieron en Canadá, otros ocho en el Reino Unido, siete en Israel y hasta catorce en la India.
De manera más concreta, aquellas que ostentan el mayor valor son Uber Technologies, Palantir Technologies –una firma de software de datos- y Space Exploration -dedicado a la fabricación de cohetes espaciales-, algo que vuelve a demostrar que “los inmigrantes juegan un papel básico a la hora de crear compañías nuevas y exitosas”, reza el estudio.
Pero, ¿a qué se debe? Según la fundación, a que algunos líderes del sector como Bill Gates y Zuckerberg han llevado a cabo diferentes iniciativas que han supuesto una llamada para los trabajadores extranjeros cualificados, que ahora tienen la opción de permanecer más tiempo en la nación. Una apuesta que, sin duda está dando sus frutos pero que otros líderes como Donald Trump pretenden detener frenando el programa de visados de trabajo. Esperemos que no pueda hacerlo.
Vía | The Wall Street Journal
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