Si bien en Windows 8 Release Preview, Aero Glass sigue presente, Microsoft ya anunció que los efectos visuales que proporciona Aero Glass desaparecerán en Windows 8. Aero Glass vino de la mano de Windows Vista, continuando en Windows 7.
El cambio lo justifica el fabricante en favor de un aspecto más claro y limpio de la interfaz de usuario, a la par que una mejor adaptación a la filosofía de la interfaz estilo Metro del nuevo Windows 8. Cambios que afectan también a las casillas de verificación, botones, deslizadores y otros elementos, con el resultado de un escritorio más plano.
El aspecto general de la interfaz de usuario se mantendrá casi sin cambios respecto de Windows 7, ya que Microsoft está estudiando ofrecer una continuidad con la plataforma anterior. Podremos personalizar el color del escritorio, mezclando colores y configurando la apariencia, pero sin Aero Glass.
Las capturas de pantalla que estáis viendo, publicadas por WinUnleaked, son de una versión pre-RTM, y no existe la certeza de que el aspecto final sea exactamente lo que ahora tenemos delante, aunque tampoco creo que difiera mucho.
Al cambiar el color básico, el primer sitio que refleja el cambio es la barra de tareas. Si activamos la casilla “usar el mismo color para el borde de las ventanas“, estos adquieren el color de la barra, que como puede apreciarse también, pierde los efectos cristal y desenfoque.
Cada cambio tiene entusiastas y detractores. Desde el punto de vista del rendimiento, cuantos menos efectos mejor. No olvidemos que Windows 8 piensa en tablet. Desde el punto de vista estético, los votos a favor o en contra dependen de vosotros. ¿Os gusta?
Imagen | WinUnleaked