Mala hierba nunca muere. O eso dicen muchos. Yo no considero que Windows Vista sea una mala hierba (más bien una simiente genial para lo que estamos viendo en Windows 7 y lo que vamos a ver en Windows 8), si bien es evidente el odio que muchos le tienen.
Pero vamos a lo que vamos, que nos dispersamos. El caso es que Microsoft ha publicado una actualización del calendario donde detalla el soporte que va a dar a sus sistemas operativos. Y sorprende ver que Windows Vista va a recibir soporte extendido hasta 2017. Todo esto mientras el soporte extendido de XP se mantiene hasta 2014.
Durante este periodo no recibirá nuevas características (ni siquiera Internet Explorer 10, como ya dijimos en su momento), pero sí actualizaciones de seguridad según vayan descubriéndose vulnerabilidades. El soporte de Windows 7 también se extiende, hasta el lejano 2020.
Las lenguas viperinas dan una razón de este colchón que está dando Microsoft a las dos últimas versiones de sus sistemas operativos: no pueden permitirse dejar a las empresas sin soporte para las plataformas que están utilizando cuando no conocen el grado de adopción que va a tener Windows 8 en este tipo de entornos.
Según se comenta, desde Microsoft no deben confiar demasiado en su próximo producto cuando están dando tanta vida a los anteriores. A los consumidores puede gustarnos o no, pero quizá un cambio tan radical no acabe de calar en las empresas que todavía no han acabado de adoptar Windows 7 (y muchas, ni siquiera Windows Vista). Os recuerdo que la semana que viene cataremos la Consumer Preview (estaremos atentos).
Vía | The Next Web