Microsoft ha confirmado que una porción del código fuente de Windows 10 fue filtrado esta semana en la web. Los archivos fueron publicados en BetaArchive, una web que se encarga de conservar repositorios de software abandonado o en fase beta, principalmente de Windows y Apple.
La filtración incluye archivos relacionados con almacenamiento, USB y controladores de Wi-Fi que forman parte de la iniciativa Shared Source de Microsoft que es usada por los socios y fabricantes de hardware. Es decir, parte del código que la empresa comparte con algunos clientes, empresas, gobiernos y otros socios.
Aunque en The Register afirmaron que se trataba de 32 TB de información que contenía "partes escenciales" del código fuente de Windows, uno de los administradores de BetaArchive ha desmentido esto y aclarado que la carpeta filtrada era de apenas 1.2 GB y que simplemente sería demasiado pequeña para contener código fuente escencial.
Algunas de las builds de la Creators Update, versiones ARM de Windows 10 y el Windows 10 Mobile Adaption Kit también estaban incluidos en la filtración. Los administradores de BetaArchive han retirado los archivos de su web, ya que va contra sus reglas.
Aun se desconocen los responsables de la filtración, pero se especula que podrían haber sido los mismos sistemas de Microsoft. En Ars Technica reportan haber recibido un reporte sin confirmación de que los sistemas de la empresa habían sido hackeados, y si tal evento tuvo lugar, las filtraciones de builds internas podrían ser la consecuencia. La otra teoria con fuerza, es que la filtración haya venido desde un socio de Microsoft o un OEM.
Vía | TheHackerNews
En Genbeta | La última beta de Windows 10 está repleta de novedades interesantes
Ver 11 comentarios