La Inteligencia Artificial llegó a Windows 11 para darle un verdadero sentido sobre Windows 10. Ha resultado ser un fiasco

Recall se presenta como una 'memoria fotográfica' de Windows 11, pero con dudas en su seguridad

Recall
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Un producto que no tenga inteligencia artificial ahora se ve como algo totalmente anticuado. La IA ha llegado a estar en boca de todos en pocos meses y con una gran cantidad de empresas detrás que apuestan por crear su propio modelo y tratan de venderlo para captar el máximo número de usuarios posible.

Microsoft no se queda atrás tras incluir dentro de su ecosistema a ChatGPT tras llegar a un acuerdo con OpenAI. Una característica a la que se puede acceder fácilmente desde cualquier parte del sistema, aunque con importantes restricciones geográficas en su uso, como por ejemplo en España.

Recall como una esperanza para Windows 11 que ha empezado con mal pie

Windows 12 iba a ser el sistema operativo donde finalmente íbamos a poder conocer el verdadero potencial de la inteligencia artificial en nuestro día a día. Si bien, desde Microsoft rompieron su calendario para dar paso a Windows 11 24H2 con todas las funciones que esperábamos para Windows 12. Aquí se hizo el verdadero intento para conseguir sacar pecho en lo que respecta a la IA con sus nuevos funciones. Sobre todo para hacer el sistema más atractivo que Windows 10 con el objetivo de atraer a más usuarios.

La cuota de mercado de Windows 10 sigue estando por las nubes, pese a su soporte acabará a finales de 2025. Esto abre un gran problema de seguridad, ya que muchos usuarios quedarán sin soporte a partir de octubre de 2025. Pero Windows 11 sigue sin cuajar dentro de los usuarios. Par ello, se trata de rescatar las herramientas de IA para que lo haga mucho más atractivo.

Una de las funciones que presentó Microsoft para 24H2 fue 'Recall'. Una característica que monitorizaría absolutamente todo lo que se hace en el día con el ordenador. Desde los mails que consultamos, las webs, los documentos e incluso escucharía las reuniones o conversaciones para poder transcribirlas. La idea es tener un diario súper detallado de todo lo que hemos hecho en el día.

Esto tiene sentido para posteriormente preguntarle a la inteligencia artificial que te indique, por ejemplo lo que se habló en la reunión que tuviste por la mañana, o los documentos con los que has trabajado. Pero esto tiene un gran problema: las dudas sobre qué hará Microsoft con toda esta información personal que se está recopilando de manera constante en el ordenador.

Fueron muchos los expertos en seguridad los que tuvieron que salir a poner la voz en el cielo tras investigar la función de Recall que salió en proceso de beta, y que no cifraba los datos. Algo que dejaba a los hackers puerta abierta para conseguir toda esta información fácilmente. A partir de ese momento, Microsoft hizo que Recall desapareciera completamente, y sin dar detalles al respecto. Lo que estaban haciendo concretamente era trabajar en perfeccionar esta medida. Todo esto incumpliendo los plazos de lanzamiento a los usuarios durante varios meses.

Finalmente, tuvimos que esperar hasta finales de agosto para poder conocer detalles sobre Recall. Microsoft detalló que ya podía compartir noticias acerca de esta herramienta que se lanzará de nuevo en versión beta durante el mes de octubre. Todo esto nuevamente sin dar explicaciones de los cambios que han hecho en Recall. Y tras el retraso tan mayúsculo, ya que debía haber visto la luz a principios de junio.

Serán nuevamente los expertos en seguridad quienes tras probar Recall en su fase beta informen si de verdad se considerará una herramienta segura o no. O si todavía hay dudas sobre la filtración de datos personales al no trabajar únicamente en el ámbito local del PC.

Lo que está claro es que pese a que Microsoft le parecía una gran idea implementar la IA a través de este sistema para destacar sobre Windows 10, al final ha sido un fiasco. Todo el mundo ha escuchado hablar de Recall, pero la realidad es que con numerosos puntos negativos y preocupaciones sobre la seguridad.

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