Vámonos con las redes sociales, en este caso, orientadas a las adolescentes. Si años atrás, las adoelscentes se divertían comprando y vistiendo a sus muñecas, en la era 2.0 las actuales adolescentes no iban a ser menos, pero adaptado a estos tiempos.
Nos encontramos con Stardoll, una red social donde la función principal es la de confeccionar la propia muñeca a medida o utilizar muñecas de personas famosas ya establecidas, donde se pueden encontrar a actores, actrices, cantantes, modelos, realeza, etc, para luego comprarles ropa para poder vestirlas a la moda. Se pueden escoger entre utilizar muñecas de personas famosas disponible gratuitamente o bien comprar otras.
Lo más gracioso del asunto es al registrase ofrecen 30 stardollares, la moneda virtual de la comunidad, para la compra de ropa y complementos para cada muñeca, que se podrá aumentar por recomendaciones para su registro a otros usuarios y a través de las recargas económicas, habiendo cuatro vías para su compra. La compra de monedas virtuales dan acceso a ser Superstar, donde los usuarios obtienen una serie de ventajas frente al resto.
Una vez elegida la muñeca, que podrá ser chico o chica, vestida, se podrá elegir un escenario de los que hay disponibles y, una vez publicada, el resto de usuarios ya podrán dejar sus propios comentarios.
Esta red social, en el que se pueden crear redes de contactos, se complementan con libros de visitas, diarios de pensamientos, donde se pueden establecer tres niveles de privacidad y añadir otros diarios como favoritos, álbumes de imágenes, en el que los demás usuarios podrán dejar comentarios, y redes de contactos, en el que se podrá establecer conversaciones privadas de correo.
Y aunque va dirigido a las adolescentes principalmente, los adolescentes también pueden registrarse, con lo que en todo caso accederán a un sitio que dispone de unas normas de seguridad y una serie de filtros y moderaciones constantes para garantizar la seguridad de los menores en esta comunidad.
Ah, y entre otros idiomas, está disponible en español.
Vía | TechCrunch Enlace | Stardoll