El reciente anuncio del cierre del servicio Google Reader el próximo 1 de julio ha traumatizado a muchos de sus usuarios (entre los que me incluyo). A pesar de la existencia de otras alternativas, la inercia de estar acostumbrado a un producto concreto hace que, al menos al principio, cualquier otro nos parezca incompleto y extraño.
La comunidad de usuarios se está moviendo para pedir a la compañía de Mountain View que no cierre Google Reader. La iniciativa ha partido de Estados Unidos, donde se han habilitado varios sitios para recoger firmas. De momento, la cantidad es pequeña, pero según estoy escribiendo estas líneas, crece sin cesar.
Probablemente harían falta millones de firmas para que Google reconsiderara su postura. Tal vez ni con eso lo vaya a pensar, bien porque decididamente no le interesa, bien porque tenga otros planes, como una posible integración en Google+.
En la que parece ser la primera iniciativa por número de firmas, alojada en change.org (hay más de una), el promotor de la idea, Dan Lewis, le recuerda a Google que invierte en proyectos que nunca verán la luz.
También le pide al gigante californiano que respete la voluntad de sus usuarios. En el breve tiempo que he invertido en redactar esta nota, he visto crecer las peticiones en varios miles. Ahora mismo la cifra en la petición de Dan Lewis supera las 45.000 firmas. Cualquier camino, por largo que sea, requiere un primer paso.
Vía | change.org En Genbeta | Huérfanos de Reader
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