La cruzada de los titulares de derechos de autor contra las páginas de descargas se está recrudeciendo en los últimos meses, y si a mediados de marzo ya hablábamos de cómo se estaba permitiendo que los gobiernos pudieran tomar el control de los dominios de ciertas páginas web, ahora el punto de mira parece estar puesto en los motores de búsqueda, las empresas de alojamiento y los proveedores de Internet.
Concretamente, lo que se está empezando a buscar en cada vez más demandas es que estas empresas dejen de enlazar a estas páginas o hacer cualquier tipo de negocio con ellas, algo que ha acabado provocando las protestas de la Computer & Communications Industry Association (CCIA), entre cuyos miembros se encuentran gigantes como Facebook, Google o Microsoft.
La gota que ha colmado el vaso ha sido la demanda de la editorial Elsevier contra las páginas libgen.org y sci-hub.org, a las cuales ha acusado de distribuir ilegalmente millones de artículos científicos. En esa demanda la editorial ha pedido una orden judicial preliminar para que se prohíba el alojamiento de esas páginas y se las elimine de los buscadores, y aunque estas aun no se han pronunciado las grandes tecnológicas sí que han acabado haciéndolo.
La CCIA quiere mantenerse al margen
Según la CCIA, lo que los demandantes están buscando es en esencia una medida cautelar contra el mundo, una tan radical contra las empresas intermediarias que nada tienen que ver con el asunto que es sencillamente inadmisible. La asociación de empresas tecnológicas también han asegurado que los proveedores de servicios neutrales ni participan ni están en concierto con los acusados, por lo que deberían ser excluidas del texto propuesto.
Los buscadores no colaboran con las páginas a las que enlazan
Para ilustrar su queja, las empresas han puesto como ejemplo a los motores de búsqueda, los cuales posiblemente estén enlazando a esas y muchas otras páginas de descargas, aunque no por eso tienen por qué estar colaborando con ellas a la hora de violar la ley. Además, la CCIA también apunta que en cualquier caso estos asuntos deberían resolverse a través de la DMCA y no a través de medidas cauterlares.Por lo tanto las grandes empresas se han manifestado en contra de las medidas que se están empezando a tomar contra algunas páginas de descargas, sí, pero no precisamente porque quieran defenderlas a ellas, sino porque miran por su propio interés queriendo mantenerse al margen y que deje de insinuarse que no participar en la lucha contra ellas es lo mismo que apoyarlas.
Vía | Torrent Freak
Imagen | John Trainor
En Genbeta | La industria continúa su cruzada contra las descargas, ahora su objetivo son los dominios
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