Change.org, pese a no terminar de ser un método con verdadero valor, se ha convertido en uno de los portales estrella a la hora de canalizar las peticiones de los ciudadanos respecto a múltiples temas. La mecánica ya la conoces, creas una petición y empiezas compartirla en redes sociales para recoger firmas y darle más fuerza.
Aunque por lo general la gente suele utilizar bien esta plataforma, desde hace tiempo vienen registrándose otros usos que nada tienen que ver con su filosofía. Tal y como apunta Torrent Freak, uno de los usos ocultos que se le está dando en los últimos tiempos es el de difundir series y películas ripeadas como si de una página de torrents se tratase.
Este tipo de uso no es nuevo, y lleva denunciándose desde 2012 sin que Change.org parezca haber conseguido cerrar el grifo. De hecho, es suficiente con entrar en la página y escribir términos relacionados con el ripeo en el buscador. Por ejemplo, con sólo poner DVDRip verás que aparecen varias series y películas.
El método que se utiliza es el de crear una iniciativa en la que como título se incluya el nombre de la serie o película que se quiere difundir y términos de los que hablábamos antes, como DVDRip, HDRip o cualquier otro que suela utilizarse en buscadores de torrent y que ayuden a encontrar el contenido que se está subiendo.
Aquí tienes un ejemplo para que veas cómo funciona. En la descripción de la iniciativa se pone qué es lo que se va a ver, se introducen más palabras clave y los enlaces para acceder a las descargas. Como veréis, las páginas a las que apuntan los de estos ejemplos están ya cerradas, pero sirven como ejemplo para ver la mecánica.
No nos fiemos de los enlaces
Aunque gran parte de estas iniciativas que funcionan como caballos de Troya para colar contenido de dudosa legalidad en Change.org cumplen con lo que prometen, permitir que los usuarios descarguen determinadas series y películas, hay que extremar las precauciones porque también puede usarse el mismo método para difundir malware.
Muchas de estas páginas enlazan a su teórico contenido mediante direcciones acortadas, de manera que no hay forma de saber a dónde nos llevan realmente, y es fácil que podamos acabar en páginas de terceros con dudosas intenciones. Por eso, lo mejor es simplemente no utilizar este método, o por lo menos estate atento a las denuncias que puedan haber dejado otros usuarios en forma de comentarios.
Como vemos, quien quiere difundir contenido encuentra miles de maneras de hacerlo, ya sea aprovechando puertas traseras en YouTube como mediante otros portales de gran renombre como Change.org. A la plataforma le corresponde intentar luchar contra estas prácticas, pero viendo que pasado el tiempo siguen aquí parece que en algo están fallando.
Vía | Torrent Freak
En Genbeta | Una puerta trasera convierte a YouTube en una gran base de datos de... porno
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