La acción de Snap se desploma al cierre tras comunicar sus resultados del segundo trimestre en los que no ha cumplido con la expectativa de crecimiento de usuarios activos al día, ni la de ingresos ni la de beneficios. Son unos resultados peor de lo pronosticado.
Snapchat cuenta con 173,2 millones de usuarios que entran a la aplicación al menos una vez al día. Es un 20% más que en el mismo periodo del año anterior, pero los analistas esperaban que superase los 175 millones de usuarios activos. Sólo ha sumado 7,3 millones de usuarios este último trimestre.
Ha ingresado 181,7 millones de dólares y se esperaban 185,8 millones. Y los ingresos medios por usuario son un 10% menos de lo esperado.
En este periodo de malas cifras, Snap ha gastado 228 millones de dólares. Es una máquina de quemar dinero, aunque se incluyen las compensaciones en las pérdidas. Está gastando el doble de lo que ingresa.
El 80% de sus ingresos provienen de usuarios de Norteamérica, el mercado más jugoso para la publicidad del mundo. Indica que existe todavía un gran margen de crecimiento, el problema es saber cuándo podrá ser aprovechado. Parece una oportunidad perdida antes el gran crecimiento de Instagram y sus Stories, un clon de la función principal de Snapchat.
El mayor problema es casi su nulo crecimiento fuera de los principales mercados, justo donde reside una de las principales fortalezas de Facebook.
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