Facebook sigue acaparando todos los titulares en lo que a su publicidad se refiere. Primero, con los estudios que afirmaban que ésta no era efectiva. Después, con Facebook recurriendo a otros informes distintos que probaban lo contrario. Ahora sabemos que, además, la red social de Mark Zuckerberg pronto presentará una nueva forma de contratar publicidad: Facebook Exchange, o venta de publicidad por subasta.
Con este sistema, que sólo afectará a los anuncios que aparecen en la sidebar del sitio (y no al resto), Facebook permitirá que cualquier compañía puje en tiempo real para que sean sus anuncios los que se muestren al usuario de manera personalizada y en función de su historial de navegación. El proceso, tal y como ha aclarado Facebook a TechCrunch, funcionará de la siguiente manera:
Cómo funciona Facebook Exchange
1. Un usuario visita una página web cualquiera, pongamos de temática viajes, que tiene contratada publicidad con una empresa de anuncios ajena a Facebook. 2. En el ordenador del usuario se indica esta visita, normalmente si ha habido intento de compra, mediante una cookie. 3. Cuando el usuario visita Facebook y se detecta esa cookie, se notifica a las agencias de anuncios. Se comienza entonces una subasta en la que se ofrece la posibilidad de mostrar anuncios relevantes al usuario. 4. El anunciante cuya puja haya sido la más alta aparece en las posiciones publicitarias mostradas en el sidebar de Facebook. 5. Se da la opción al usuario de votar negativamente al anuncio.
Puede parecer lioso, pero aquí va un ejemplo que lo aclararía un poco. Un usuario visita una página de un conocido fabricante de ordenadores y le interesa mucho el modelo X, pero al final decide no comprar. La próxima vez, cuando entre a Facebook, podría encontrarse anuncios de distintas superficies comerciales que ofrecen el modelo X que le interesaba a distintos precios, con ofertas personalizadas para él.
¿Será el boom publicitario que Facebook espera?
Para los anunciantes, este nuevo formato es una gran noticia, ya que cubre dos necesidades. Por un lado, los anuncios van mucho más dirigidos hacia un target más específico. Por otro, se puede detectar la "urgencia" (ejemplo: un usuario que visita y está a punto de comprar cierto producto, pero al final decide dar marcha atrás) con el fin de "consumar" la venta cuanto antes. Al ser pujas y anuncios elegidos casi en tiempo real, otra ventaja es la posibilidad de publicitar algo más instantáneo, como por ejemplo un programa que se está emitiendo en esos momentos en televisión.
El aspecto negativo es, como suele ocurrir, la reacción que puedan tener los usuarios a esta publicidad cada vez más personalizada. Lo cierto es que las plataformas de anuncios cada vez saben más de nuestros hábitos de navegación a través de las cookies de seguimiento que almacenan en nuestros equipos, pero el problema es que ahora esas cookies repercutirán en los anuncios que estos usuarios verán en sus cuentas y, por ahora, Facebook no tiene pensado dar la opción de evitarlo.
Vía | TechCrunch En Genbeta Social Media | Los usuarios de Facebook no hacen click en la publicidad, ¿problemas para Mark Zuckerberg?