Cuando el 20 de septiembre Google+ abrió sus puertas a todos los usuarios sin necesidad de invitación, parecía que todo iba bien. Aquel día el tráfico de la red social creció un 1.200% y las expectativas volaban por encima de las nubes pero, ¿qué pasó después?
Pues según DailyMail ocurrió lo que cualquiera puede comprobar pasándose por el nuevo proyecto de los del buscador, y es que tener muchas cuentas abiertas no garantiza usuarios activos. Es decir, que su tráfico (su uso real) ha caído un 60% desde que se liberó el acceso. Eso sí, mejor coger los datos con pinzas.
El descenso responde a datos objetivos y eso no es algo discutible, sin embargo, si que lo es la perspectiva que se le da. Si inicialmente creció un 1.200% y después perdió de ese total un 60%, el resultado final es que, pasando por todo el proceso, en apenas tres semanas ha crecido un 480%. Desde luego, unas cifras que no están nada mal.
Es cierto que la red tiene una difícil competencia contra un servicio tan asentado como Facebook, con 800 millones de personas registradas. Tampoco sería mentir que hoy por hoy el incentivo para entrar a la nueva red de Larry Page es bajo, ya que todavía no ha alcanzado una masa crítica de usuarios que le permita llegar a todo el público; sin embargo, sería de ciegos negar que hasta ahora los resultados son, dadas las circunstancias, un éxito.