Las personas que han cotizado menos de 15 años en España no pueden acceder a la pensión contributiva, pero sí hay otras opciones para recibir un dinero en su jubilación
A menudo vemos en Genbeta uno de los temas que más puede preocupar a cada trabajador español: la pensión que quedará tras la jubilación, según los años cotizados y según la base de cotización.
Tienes esta tabla que te dice la pensión máxima que cobrarás según tu sueldo y años cotizados; calculadoras que te ayudan a estimar la cantidad que te va a quedar si te jubilas antes de tiempo; y puedes acceder a información detallada para solicitar tu pensión a través de internet, entre otros asuntos.
Hoy vamos a ver cómo se presenta el panorama actual para las personas que hayan cotizado solamente 10 años de su vida. Aquí es muy importante comprender cómo funciona el sistema en España.
La Seguridad Social es fundamental en el proceso de la gestión de las pensiones contributivas de jubilación, pero también existen las pensiones no contributivas y esas vienen administradas por otro organismo: el IMSERSO. Este ofrece una alternativa para quienes no cumplen con los requisitos de cotización mínima.
Pensiones disponibles con 10 años de cotización
Para poder optar a una pensión contributiva, la Seguridad Social exige que una persona haya cotizado al menos 15 años y que, por lo menos dos estén dentro de los 15 años previos a la solicitud de la pensión. Esto se traduce a que si solo has trabajado una década no tienes acceso a estas pensiones. Ya habíamos visto que jubilarse a los 60 años con 15 años cotizados es extremadamente complicado: y en este enlace puedes también ver los casos en que puedes hacerlo
Por ello, lo que está a tu disposición es la pensión no contributiva aunque hay requisitos: tienes que tener una edad mínima de 65 años, residir en territorio español durante diez años y unos muy bajos ingresos ingresos anuales en el domicilio.
Cabe recordar aquí que las amas de casa tienen derecho a cobrar hasta 7250,60 euros al año de pensión y, en muchos casos, este puede ser el perfil de personas que ha cotizado pocos años: gente que se ha dedicado al trabajo del hogar, donde no se cotiza.
En general, de acuerdo con la información que recoge la página web del IMSERSO, la cuantía de la pensión no contributiva de jubilación es de 517,90 euros mensuales y 7.250,60 euros anuales. Aunque puede haber otros casos. Por ejemplo, si en un hogar hay dos personas en la misma situación, la cuantía para cada uno de ellos es de 440,22 euros mensuales y 6.163,01 euros anuales.
Otra opción es que haya algún tipo de discapacidad. Una persona con un grado de discapacidad igual o superior al 45% podría acceder a una jubilación anticipada con 5 años cotizados. Además, quienes tienen un grado del 65% o más pueden jubilarse a partir de los 52 años.
Imagen | Foto de Jonathan Cooper en Unsplash
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