Tras su alumbramiento en febrero de 2004, Facebook se ha convertido en la red social por excelencia; un lugar de referencia en el que cientos de personas intercambiamos experiencias y llevamos a cabo toda clase de acciones que han ido evolucionando con el tiempo.
Un amplio periodo que, inevitablemente y si fuiste de los primeros en registrarte, ha llevado aparejado el almacenaje de un amplio abanico de contenido, que abarca desde fotografías, comentarios, enlaces compartidos y un largo etcétera que ya te puedes suponer. Una cantidad de información personal que también tienes la posibilidad de descargar en tu propio ordenador.
Tu historia en Facebook
Así, la plataforma dispone de una opción específica que nos permite hacernos con todo este material que, de un modo u otro, cuenta “la historia” de nuestra vida; un compendio que, además de lo comentado, incluye detalles como aquellos amigos a los que hemos bloqueado durante nuestra trayectoria en la comunidad virtual, actualizaciones de estado y, en definitiva, todo lo que hemos estado haciendo en la red de Zuckerberg.
Una prestación que, al mismo tiempo, nos brinda la oportunidad de conocer qué sabe exactamente el gigante tecnológico de nosotros o, al menos, qué le hemos dicho a lo largo de los años. Incluso se incluyen datos que no resultan tan obvios, como las direcciones IP, las aplicaciones que hemos ido añadiendo, los nombres alternativos que hemos usado, la fecha, hora exacta y el lugar desde el que nos registramos.
Sucede lo mismo con los anuncios que hemos hecho clic (aunque este periodo de conservación es limitado), todas las sesiones activas almacenadas –con su correspondiente fecha, dirección IP, información sobre el navegador y las cookies del dispositivo, el historial de conversaciones que hayamos tenido en el chat de Facebook, y otros datos relacionados con si hemos llevado a cabo compras a través de la entidad, los correos electrónicos que hemos empleado en esta comunidad, las cuentas vinculadas y más.
La lista de cuentas vinculadas, las veces que hemos pinchado en “me gusta” fuera de Facebook, las ocasiones en las que has indicado que te agradaban publicaciones del resto, los elementos que has ocultado en tu sección de noticias, números de teléfono que has añadido, los metadatos de las fotos, y toques también figuran.
Unas posibilidades que, al mismo tiempo, nos hacen conscientes del poder de Facebook. Relaciones familiares y sentimentales (no solo las actuales), educación, trabajos, lugares que hemos visitado, seguidores, citas favoritas, solicitudes de amistad, grupos y similares también se encuentran presentes. Pero vayamos al meollo de la cuestión, el proceso para obtener toda esta información.
Cómo obtener el contenido
- En primer lugar y una vez conectado a Facebook, haz clic en el desplegable que aparece en la parte superior derecha de la pantalla (lo hallarás al lado del símbolo del candado. A continuación, selecciona el apartado de Configuración (se encuentra en quinto lugar empezando desde el final de la lista).
Una vez dentro, tendrás acceso a información básica, como tu nombre de usuario, temperatura, cuentas, la fecha de la última vez que cambiaste la contraseña y otros parámetros por los que tendrás la posibilidad de navegar. Sin embargo, no será necesario pues, en la base de este panel general se integra la opción de descargar una copia de tu información.
Tras pinchar sobre este enlace, Facebook te ofrecerá una breve descripción del proceso que estás a punto de llevar a cabo y todo lo que podrías encontrarte por el camino. “Obtén una copia de lo que has compartido en Facebook”. Añade una lista breve y concisa que puedes ampliar entrando en “Y mucho más”.
- Pulsa el botón verde de “Crear mi archivo” e introduce la contraseña de tu cuenta de nuevo, tal y como se te pide. A continuación recibirás una advertencia en la que puede leerse “es posible que tardemos un poco en recopilar tus fotos, publicaciones en el muro, mensajes y otra información. Después, te pediremos que verifiques tu identidad para proteger la seguridad de tu cuenta”.
- Al confirmar que has entendido el mensaje, una ventana emergente te avisará de que la entidad está recopilando toda esta información y que, una vez lo haga por completo, te enviará un correo electrónico indicándote que ya está lista para descargarse.
- En unos segundos recibirás un e-mail en el que se te indicará que has solicitado la descarga y, poco después (unos dos minutos aproximadamente, en el caso de una servidora), otro en el que se incluirá el enlace que te permitirá bajar la información demandada.
- El correo te advertirá de que este puede contener información privada que deberías proteger y tomar precauciones a la hora de almacenarla o subirla a otro servicio. El link en cuestión –que se invalidará en “unos días” por razones de seguridad- te llevará a tu página de configuración de nuevo, en la que ya será posible hacerse con el contenido pinchando en “Descargar archivo”.
- Teclea tu contraseña de nuevo… y ¡listo! Automáticamente se empezará a bajar un zip en el que encontrarás, tal y como puedes apreciar en la imagen, cuatro archivos distintos. A saber: html, index, potos, videos; cada uno de los cuales corresponde a sus respectivas categorías.
- En html se incluyen los temas de los anuncios en los que has hecho clic, información de contacto, eventos, amigos, mensajes, fotos, lugares visitados, parámetros de seguridad, toques, encuestas y más; mientras que en index toparás con información personal como relaciones anteriores, trabajos y más. La carpeta de fotos y vídeos resultan un tanto caóticas.
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