La caja de los truenos ha vuelto a ser destapada. Durante el fin de semana Thom Yorke y Nigel Godrich anunciaron que "retiraban sus canciones de Spotify":https://www.genbeta.com/multimedia/thom-yorke-y-nigel-godrich-ponen-en-duda-la-rentabilidad-del-streaming-de-musica-para-los-artistas y otros servicios de streaming de música porque, entienden, éstos no pagan lo que deberían a los artistas.
Esta noticia se produjo semanas después de que Pandora se viese envuelta en "una polémica":http://www.theverge.com/2013/7/9/4475102/pandroas-pr-problem-why-the-company-cant-win-in-washington por el mismo motivo. Estas quejas, para bien o para mal, no son ninguna novedad. Los artistas no están contentos con la cantidad que reciben de Spotify, Rdio o Deezer e intentan que el dinero que reciben por canción reproducida sea mucho mayor.
En el caso de los servicios de streaming de música estamos ante una situación curiosa. Una serie de empresas como Spotify, Rdio o Deezer dependen de los contenidos que poseen las discográficas, es decir, venden el acceso a un activo que ni siquiera ellas mismas controlan o poseen. Las discográficas, por otro lado, han visto el streaming de música como un posible sustituto de los ingresos perdidos en la venta de música en formato físico en los últimos años y quién sabe si también de la venta individual de canciones digitales.
Los artistas, que en la gran mayoría de los casos tienen contratos con las grandes discográficas o con otras independientes, ven como el streaming de música no es capaz de sustituir los ingresos que antes tenían por la venta de CDs o incluso equipararse al dinero que reciben por la venta de álbumes a través de plataformas como iTunes o Amazon.
¿La consecuencia de todo esto? Estamos ante un nuevo mercado - el streaming de música como negocio no tiene más de tres años de antigüedad - en el que conviven unas empresas que están lejos de alcanzar la rentabilidad (Spotify, Rdio, Deezer, Pandora, etc) con otras que tienen la sartén de los contenidos cogida por el mando (las discográficas) y cuyas decisiones empresariales afectan a los artistas (que creen que su trabajo no se valora lo suficiente) y a los usuarios (que ven en el streaming la "forma más cómoda de consumir música":https://www.genbeta.com/multimedia/el-pago-por-servicios-de-streaming-de-musica-crecio-un-94-en-espana-en-2012, pagando por ella).
Los pagos de las empresas de streaming a los artistas
Es imposible conocer con exactitud cómo se distribuyen los ingresos de empresas como Spotify entre los artistas. Spotify y otros servicios similares no pagan en ningún caso directamente al artista (igual que el artista no puede _apuntarse_ directamente en dichas plataformas) sino que todo el proceso se realiza a través de intermediarios como "SoundExchange":http://www.soundexchange.com/, que a su vez distribuye el dinero a las discográficas que son las que pagarán finalmente al artista, en función de los contratos que hayan firmado en un primer momento.
Nos encontramos por lo tanto ante una industria compleja en la que participan muchos actores diferentes. Una imagen vale más que mil palabras.

En los últimos meses nos hemos podido hacer una idea de lo que reciben algunos artistas de los diferentes servicios. Cantidades por reproducción (o stream) que son relativamente pequeñas para los grandes artistas que son capaces de llenar estadios y minúsculas para artistas independientes y otros músicos que están comenzando su carrera.
-
Grizzly Bear: 0,001 dólares por stream (Spotify)
-
Lady Gaga: 162 dólares por un millón de reproducciones (Spotify)
-
Vetusta Morla: 100 euros al mes por la reproducción de su tema más conocido, Copenhage (Spotify, en 2011)
-
David Lowery: 0,000015 dólares por reproducción (Pandora)
En resumen, cifras muy pequeñas que demuestran que el streaming, al menos por ahora, no es capaz de sustituir a ningún otro tipo de ingresos que los artistas puedan tener. Rdio es la única empresa que ofrece una fuente de negocio adicional a los artistas y que no depende de sus acuerdos con las discográficas; paga "10 dólares a los artistas por cada nuevo suscriptor de pago":http://www.rdio.com/artistprogram/ que atraigan.
Un negocio que no es rentable para nadie
Estamos por lo tanto ante un negocio que no es rentable ni para las propias empresas que ofrecen dichos servicios. La gran mayoría de los ingresos que reciben Spotify, Rdio o Deezer van a parar a las discográficas y es muy probable que tarden en años en alcanzar la rentabilidad.
Si para los propios servicios no es un negocio rentable es casi imposible que lo sea para los artistas y músicos. Los únicos que por ahora salen ganando con este tipo de iniciativas son las discográficas que han encontrado en el streaming una nueva y creciente fuente de ingresos.
Entonces, ¿si el streaming no es rentable quiere decir que es inútil? Ni mucho menos. Como ya mencionamos en anteriores entradas los servicios de streaming son una "plataforma de marketing importantísima para los artistas":https://www.genbeta.com/multimedia/la-industria-musical-en-espana-en-los-ultimos-5-anos-de-donde-venimos-y-hacia-donde-vamos. Una forma para darse a conocer y atraer más asistentes a los conciertos, que es donde realmente está el negocio en estos momentos. Es en las actuaciones en directo donde los márgenes para los artistas son más elevados y donde tienen más control de la experiencia y del producto que ofrecen.
Pensar que el streaming va a convertirse en el corto plazo en una fuente de dinero importante para los artistas es una utopía. Sin embargo, no debemos olvidar que estamos ante un mercado que no tiene ni tres años de vida y que se encuentra en constante evolución por el impacto del móvil y otras tecnologías. El mundo no se acaba donde termina el streaming: existen plataformas como "Bandcamp":http://bandcamp.com/ que pueden ser utilizadas por los artistas para darse a conocer y también para vender copias digitales de sus obras (con unos márgenes importantes), existen los conciertos y las actuaciones en vivo, existe el merchandising. En definitiva, existen muchas fuentes de ingresos que, utilizadas de forma conjunta, pueden convertirse en una importante fuente de negocio para los artistas. Al menos hasta que el streaming mejore sus cifras con la llegada de más suscriptores, si es que eso termina pasando.
Imagen | Devianart
Ver 26 comentarios
26 comentarios
iberhack
Lo primero es decir que en artículo hay un error, el streaming no empezo hace 3 años... que ya se que hay gente que piensa que no había nada antes de Spotify... pero por ejemplo Pandora ya era muy popular en 2007 antes de que se cerran a USA, yo mismo lo usaba. Pero no eran los únicos, estaba Last.fm y muchos otros. Realmente el 2006 ya mucha gente usaba streaming en España... y si nos ponemos podemos seguir hasta los 90, en donde a finales ya había radios por genero, etc por cierto, solo con publicidad en la página y así y mejor calidad que ahora.
Lo segundo, es que muchos usuarios no son conscientes de que pagan y como dejen de pagar, no tendrán acceso a su música, no es oro todo lo que reluce... a quien interesa estos sistemas es las discográficas, solo hay que ver en España como cuanta publicidad se le dio a Spotify desde televisiones, incluso en los informativos, al punto incluso de hacer reportajes de varios minutos, etc para promocionar este tipo de servicios. El motivo es que a ellos les interesa mucho, se puede pensar que así ingresan menos, pero tu estás pagando por lo mismo una y otra vez, y si dejas de pagar, pierden el acceso, o si deciden cortártelo.
Pero centremonos, entrando en el tema, algo que hay que tener en cuenta es que hay 3 tipos de servicios:
-los gratuitos como Pandora (que en España solo puedes acceder vía Global Pandora o vía VPN) o el nuevo de Apple (también por ahora solo en USA)... en donde hay que comerse anuncios, pero no hay limite de horas, etc y si no quieres anuncio, pues se paga una pequeña cantidad, pero no es necesario. Normalmente estos tu diseñas un estilo (ya sea eligiendo a partir de un grupo o unas canciones) y no hay excesiva personalización, a lo sumo tu dices si te gusta lo que escuchas o no, y dependiendo de ello toma decisiones para el futuro, pero no controlas lo que vas a oir... es el concepto de antes de la radio.
-los de pago tipo Spotify, que es cierto que hay una cuenta gratuita, pero muy limitada a unas horas al mes y saturada de publicidad... y solo en PC disponible, móviles y tal hay que pasar por caja si o si. Normalmente estos tienen un pago por mes. En estos servicios, a diferencia de los anteriores, pues tu escuchas lo que quieres escuchar, haces tus listas de reproducción y la vas escuchando.
-los almacenes de canciones online, como el de Amazon o el itunes Mach de Apple, en donde tu subes tu música (se supone que has pagado por ella antes y por tanto ya puedes escucharla cuantas veces quieras) y simplemente en lugar de cargarla encima, pues la escuchas en streaming. Normalmente exige un pago anual no muy elevado.
Hay que reconocer que la cantidad de volumen de dinero que mueven el primer tipo no es mucho, pero no es menos cierto que ingresan tanto o más que por las licencias que cobran de las radios comerciales y realmente el servicio es similar... ante ello no pueden quejarse demasiado.
En los del segundo grupo, pues el volumen de dinero es considerablemente mayor, solo hay que ver que la tarifa de Spotify para poder usarla en móvil es de 10€/mes... lo que al final hace cantidades realmente importantes. Tema aparte es que llegue poco a los artistas porque entre discográficas, intermediarios, etc se lo queden casi todo. Pero tampoco es que les llegue mucho dinero de vender discos.
En los del tercer grupo, supuestamente la gente ya pago por esas canciones y aun así, al menos las discográficas, aun reciben dinero. Cuando supuestamente ya se había pagado por ellas. Tampoco es que puedan presionar mucho en este aspecto.
Que es lo que pasa luego, porque tantas protestas, pues por varios motivos:
1º Nunca hubo tantos "artistas" como ahora, ahora cualquiera con 20K euros se puede montar un estudio y por 10K euros (si diezmil euros) puedes grabar un CD y fabricarte 10 mil copias de tu CD para vender... y claro muchos se han lanzado a la piscina, pero casi nunca hay agua. O al menos, no hay suficiente agua para vivir de la música sin trabajar el resto de tu vida y con chalet en Miami... Especialmente porque hay alguno que ha triunfado así o subiendo una vídeo a Youtube, etc y aunque estés en la cima unas semanas, pues se puede hacer mucho dinero. Pero por cada uno que triunfa, otros mil no encuentran agua y se llevan un castañazo impresionante.
2º Los muy consolidados se encuentran que le crecen los enanos por todos lados, antes una discográfica tenía una cantidad de artistas muy limitados y es que solo buscaban lo que pensaban que podía generar dinero atrayendo muchos compradores, porque en la clásica tienda de CDs de provincias (incluso de gran centro comercial como el Corte Ingles o Carrefour) no había nunca más de 100 grupos que tuvieran CDs... y en las tiendas de barrio ni eso. Solo en algunas ya muy especializadas que hacían compras fuera, o después las de ferias, romarias y gasolineras que tenían a grupos menos conocidos, pues había sitio para los más amateurs. Ahora eso cambio, en una discográfica online como iTunes tienes una burrada de artistas en donde elegir... Es lo que se llama el fin del Pareto, la era digital ha elimimando el problema del sobrecosto por tener más productos, ya que no ocupan, todo lo contrario, aunque mucha de ese producto es muy minoritario, pues acaba restando ventas, además alguno pasa de minoritario a ya con mucho público... Además lo comentado en el punto anterior, ahora cualquier puede subir su música, solo para comparar, en los años 80 montar un estudio musical medio profesional costaba en España en torno a los 25M de pesetas (unos 150K euros de ahora) y cada CD costaba producirlo unos 5M de pesestas (30K euros) más los costos en cintas, CDs, etc y aun así muchos pequeñas bandas y demás ya sacaban sus cintas y eso..., ahora tienes uno con equipo profesional por 20K euros y sacar unas 10K copias en CD con la producción y todo, te sale en unos 10K euros. Eso ha democratizado, pero para los grandes les ha jodido buena parte del negocio, ahora ya no sirven con triunfar con un CD (hay quien vive aun con un solo éxito en los 80 o 90)... ahora hay mucha competencia y por encima, cada vez tienen menos visibilidad porque hay que competir con otros y muy pocos se hacen de oro con anuncios, vendiendo la boda a las revistas, etc... antes eso daba más que vender cds.
3º España es de los países del mundo con más conciertos al año (es una barbaridad los que hay en España comparado con Alemania, Francia, RU... todos con mucha más población, pero hasta casi con USA), y si hacemos operación por población, el que más. Pero esto no solo afecta a España. Pero llenar estadios ya no es tan fácil, o bajas el cache o no te va nadie, eso de pagar 200€ por entrada (aunque hay quien llega a pagar incluso miles en reventa), pues ya no suele colar... Sumado al cambio de tendencia, los más consumidores de conciertos (la gente joven de 15 a 30 años), pues prefiere ahora los festivales, los macroconciertos... en ellos los grupos cobran mucho menos y excepto algunas superfiguras, o estas en alguno o no ingresas por otros conceptos.
4º los ingresos por royalties... pues aunque alguno se sorprenda, se han bajado mucho y eso que se recauda más que nunca. Pero antes cuando los medio grandes tenían poca competencia, pues tocaba a repartir mucho... ahora aunque el pastel es más grandes que nunca, el toca a menos en el reparto, porque hay muchos más que exigen su parte del pastel por lo comentado en apartados anteriores.
Y podría seguir con varios puntos más, pero creo que ya queda claro. Los conocidos protestan porque ingresan menos, los desconocidos porque no ingresan porque se tiraron a una piscina sin agua... Y por encima muchos pensaban que iban a ingresar burradas gracias a internet y no pasa, y luego se cabrean, porque claro el Ferrari consume mucha gasolina, el jardinero quiere cobrar todos los meses...
salu2
Angeliito
O se quita a los intermediarios que no aportan valor, o claro que los artistas no van a recibir "nada".
Pero yo ahora me gasto más dinero en música al pagar Spotify que lo que me gastaba antes.
nin1987
Repito un poco lo que dije en la otra noticia y me explico un poco más.
Básicamente, yo creo que desde que la música se ha desprendido del formato físico es muy dificil montar un negocio alrededor de su venta, y dudo mucho que este siga existiendo a largo plazo. Los archivos digitales en general se copian sin coste, y se comparten con extrema facilidad si además ocupan unas pocas megas.
¿Pueden ser rentables proyectos como spotify? Tal vez, pero pienso que cuanto menos deben desprenderse de las discográficas y tratar directamente con los artistas. El servicio en sí interesa a la gente y por eso y solo por eso puede ser interesante, la clave está en reducir gastos por royalties.
Afortunadamente, creo que caminamos hacia una época en la que la música ya no se venderá más, y donde los artistas entenderán, como muchos llevan haciendo ya desde siempre, que vivir de la música implica hacer muchos directos y no parar nunca quieto. Afortunadamente, porque gracias a esto muchos chupópteros desapareceran y se fomentará la música vocacional. La creación musical se volverá más descentralizada y la industria de millonarios quedará echa añicos. Tal vez soy demasiado optimista, pero lo veo muy posible y deseable.
Cristian
Quizás Thom Yorke y Nigel Godrich deberían recordar que ni siquiera las discográficas pagan a los artistas como deberían. Sin embargo, casi ninguno de ellos se queja de los monopolios multinacionales que montan las discográficas. Nadie se hace rico firmando cheques, muchachos.
miguelmonteagudo
Si no hubiera intermediarios si sería rentable. El gran cambio todavía no ha llegado. Y ese cambio es cuando los artistas dejen de lado a las discográficas y vayan por libre. Antes no se podía hacer eso pero ahora sí. El problema es que miles de derechos de autor de grandes grupos consagrados o que ya estan disueltos o muertos seguirán siendo de las discográficas por mucho tiempo a causa de los contratos abusivos que firmaron. Ese es el gran tapón que no deja avanzar este modelo de negocio. No puede ser que para poner música de Queen o los Beatles en streaming la discográfica me ponga unos precios astronómicos inasumibles por el servicio de streaming (y esto tiene mucho que ver también con la caducidad de los derechos de explotación de las canciones). Asi es imposible. Eso si cuando los nuevos grupos que vayan por libre empiecen a triunfar y no tengan discográfica detrás entonces las cosas pueden empezar a cambiar.
rombo
El problema no es que el streaming no sea rentable, el gran problema es (una vez más) el porcentaje que se llevan las discográficas.
wamss
Yo creo que se lo deberían plantear de otra forma. O aceptan el streaming de música como su nuevo modelo de negocio o se quedan sin negocio. Lo de demonizar la piratería ya no funciona...
Actualmente sólo conozco dos tipos de personas, los que pagan Spotify (o similares) y están encantados y los que escuchan la música sin pagar un euro (cada uno con su método preferido más o menos "legal").
almarag
La palabra mágica es: Intermediarios. Mientras sigan existiendo, seguirán las pérdidas. Eso es lo que tiene la tecnología, que hace cada vez más prescindibles a muchas personas que no se adaptan al cambio tecnológico, por eso se defienden cual gato boca arriba.
El entorno ideal para que esta ecuación funcione es que el artista reciba directamente la ganancia desde el sitio en cuestión, ya sea iTunes o Spotify o lo que sea. Pero existe un chupóptero llamado disquera que se queda con el 90% del ingreso. Eso es lo que debe desaparecer o reducir su participación. Mientras eso no ocurra, obviamente seguirá la fuga de dinero. Esto es común en cualquier empresa que se automatiza. No entiendo por qué en esta industria es tan difícil de entender.
qognoz
Curioso que netflix es rentable, produce contenidos propios y se considera el futuro de la TV y en musica no funciona el modelo