Lo que necesitas saber sobre el estándar de mensajería RCS

El estándar RCS (_Rich Communication Services_) viene a ser el sucesor de los SMS, esa tecnología que casi nadie usa desde que WhatsApp se hizo popular. Google lleva años intentando promover estos servicios de comunicación enriquecidos en Android, y hoy nos despertamos con la noticias de que el soporte finalmente ha llegado al menos a una aplicación importante: Google Messenger.

Esta nueva generación de mensajería ofrece funciones mejoradas que van más allá de los simples mensajes de texto y llamadas de voz. Los consumidores podríamos chatear de forma instantánea, compartir archivos a través de diferentes dispositivos y redes y transmitir vídeo. Es decir, lo que hacen cosas como iMessage, WhatsApp y Telegram, pero directamente a través de tu operador y no de una app de terceros.

La evolución de los prehistóricos SMS y MMS

El protocolo SMS se creó mucho antes de que los operadores de telefonía siquiera pensaran en ofrecer datos por Internet. Está tan desactualizado que ya casi nadie lo usa, todas las aplicaciones modernas de mensajería lo han superado con creces y es ahí donde el estándar RCS entra en acción. Pero, ¿por qué ha tardado tanto?

El problema: necesitas que tu operador lo soporte, que tu dispositivo lo soporte y tener instalada una aplicación que lo soporte. El RCS ha intentando despegar en varios territorios pero no lo ha logrado. Cada operador iba por su cuenta implementando su propio perfil causando problemas de compatibilidad entre una aplicación y otra, un dispositivo y otro y un operador y otro.

Google llegó al rescate y ofreció la solución con un perfil universal: Jibe. Funcionará con cualquier operadora como los actuales SMS y MMS, y al miso tiempo cada operador gestiona su propio servicio y puede cobrar por él. Los mensajes RCS no pasarán nunca por los servidores de Google, solo por los de nuestro operador.

¿Si ya tengo WhatsApp para que quiero esto?

Aunque es un argumento bastante válido, el hecho de que existan muchas plataformas de mensajerías ya establecidas que hacen todo lo que ofrece el estándar RCS y más, no quiere decir que este sea completamente inútil e innecesario.

Facebook Messenger, Hangouts, Allo, WhatsApp, Telegram, etc. todos son excelentes opciones y que innovan a un paso mucho más rápido que los operadores, si algo queda claro con el tiempo que les ha tomado empezar a hacer realidad el RCS, pero este último tiene una gran ventaja: está ligado a tu número de teléfono y no necesitas instalar nada, ni crear una cuenta para usarlo.

Todavía falta

De momento el estándar RCS solo está implementado en Android y pocos operadores lo soportan, apenas están empezando a probarlo en Estados Unidos como un servicio gratuito. Sin embargo, que la aplicación de SMS de Google ya lo incluya, es un gran paso hacia delante. Google ya está asociado con muchos carriers y fabricantes para ofrecer un cliente que sea interoperativo a través de cualquier plataforma.

Google Messenger podría llegar en un futuro no muy lejano a Windows o iOS, y si el resto de operadores GSMA activa el soporte el estándar podría terminar de despegar. Sin embargo, si los operadores quieren competir con WhatsApp o iMessage no pueden empezar a cobrar desde el principio, nadie los va a preferir sobre algo completamente gratuito y probablemente mejor.

El RCS existe por una simple razón: los operadores no obtienen nada de ganancias además de los datos que consumes cada vez que usas apps como WhatsApp, no es sorprendente que quieran cambiar esto. Pero, como cada empresa busca su propio beneficio, les ha tomado años encontrar un punto neutro, así que ha terminado siendo Google quien ofrece la mejor solución.

Es posible que ya sea algo tarde para que triunfe y los usuarios lo adopten por encima de las soluciones a las que ya se acostumbraron, pero no se puede menospreciar al poder de la simplicidad de usar solo tu número de teléfono para comunicarte. Sea como sea, es una mejora a un protocolo que cada vez se siente más y más incoherente en relación con las tecnologías modernas.