Hace poco, mi compañero Gallego nos comentaba acerca de los planes que tiene Adobe para Flash, citando que la intención de la compañía es tener la versión 11.2 del reproductor para el primer cuarto del año. Esto es positivo para todos los usuarios menos para aquellos que usen Linux, pues ésta será la última versión del reproductor que sacarán para el sistema del pinguino.
Así es: Adobe descontinuará Flash para Linux desde la versión 11.2, aunque continuará realizando actualizaciones de seguridad durante cinco años más. Sin embargo, esto no significa que no se podrá contar con una versión oficial de Flash en dicho sistema, pues la podremos encontrar dentro de Chrome.
La cosa es así: Adobe ha estado trabajando con Google para desarrollar una API de plugins más moderna llamada PPAPI (o Pepper) que sustituya a la actual. Por ello, proveerá a los de Mountain View de una versión especial de Flash basada en esta API que irá incluida dentro de Chrome para todas las plataformas. Sí, incluido Linux.
De esta forma, a menos que recurramos a alternativas como Gnash, la única forma de visualizar Flash desde Linux será a través de Chrome. Este reproductor empotrado en el navegador se beneficiará también de las mejoras que vayan incluyendo en las nuevas versiones pues su desarrollo será constante.
Por mi parte, no veo con buenos ojos este movimiento de Adobe. Sin embargo, considerando hacia donde se quieren enfocar y el retroceso que está sufriendo Flash en los terrenos en los que antes dominaba (como el vídeo), creo que el perjuicio no es tan grande. Si las cosas siguen progresando como hasta ahora, es posible que pronto ni siquiera le echemos de menos en la web. Aunque todavía falta lo suyo, esperemos que el uso de Flash se reduzca antes de que se cumplan esos cinco años de actualizaciones de seguridad.
Gracias a Diego González por el aviso en un comentario.