En las versiones de escritorio de las distintas distribuciones de Linux estamos acostumbrados a ver como la linea de comandos no aparece, casi, por ningún lado, con la idea de facilitar la vida a los usuarios y que todas las tareas se puedan hacer de forma gráfica.
Pero la línea de comandos no nos debe dar miedo, tal como demuestra INX, una distribución que elimina el servidor de X-Window, funcionando exclusivamente desde la consola de texto. A pesar de ello, quiere facilitar la vida al usuario, para lo que incluye un buen montón de programas que pueden ser usados en modo texto.
Desde reproductores de música y vídeo (que podremos usar mediante el framebuffer) hasta juegos y aplicaciones para configurar el sistema, ninguna de ellas requiere un entorno gráfico para funcionar, aunque muchas pueden aprovechar el ratón, si disponemos de él.
INX será una aplicación ideal para usar en ordenadores poco potentes o en el caso que queramos aprender a manejarnos en el terminal de texto. Ocupa poco, unos 190 MB, y se ejecuta como un live CD, sin necesidad de instalar nada en el disco duro.
Vía | LinuxHaxor. Enlace | INX.