Jonathan Riddell, el desarrollador principal del proyecto Kubuntu, ha anunciado que la variante de Ubuntu basada en KDE, ya no será financiada por Canonical después de la próxima versión 12.04 Precise Pangolin.
Kubuntu se desarrollará en su totalidad por voluntarios, al igual que otras variantes de Ubuntu. El motivo oficial es puramente económico. Después de siete años trabajando en el proyecto, éste no ha tenido éxito comercial y Canonical no desea seguir con su financiación.
Kubuntu ha alcanzado un buen grado de madurez, compitiendo con otras distribuciones GNU/Linux que integran muy bien KDE, como OpenSUSE. Sin embargo, a pesar del éxito entre los usuarios privados, en el mundo empresarial no ha calado lo suficiente como para seguir con él.
Además de las razones oficiales, que no pongo en duda, cabría pensar que Canonical prefiere centrar sus esfuerzos en Unity, su particular apuesta para el presente y futuro de un modelo de negocio, mayoritariamente sustentado en la oferta de servicios para empresas.
También en que el proyecto KDE hace tiempo que ha trascendido el ámbito puro de entorno de escritorio y se ha convertido en un ecosistema difícil de mantener en paralelo con un producto propio, con el que además compite.
Es una mala noticia para la comunidad de usuarios de Kubuntu aunque no desaparezca. Afortunadamente, una de las grandes ventajas de GNU/Linux es la cantidad de alternativas existentes, como OpenSUSE o Linux Mint, por citar algunas.
Vía | Arstechnica
Imagen | Kubuntu