Scala.js deja de tener la etiqueta de experimental para poder ser utilizado en entornos de producción sin miedo. Palabras expresadas por sus creadores ante la última versión de Scala.js 0.6. Tras dos largos años de desarrollo, Scala.js se convierte en un herramienta fiable para que desarrolladores de Scala se atrevan al desarrollo web del lado del cliente. Compilando su código sin perder ni un ápice de la potencia de Scala en JavaScript.
Scala.js compila los ficheros .scala a ficheros .js optimizados y minificados. El resultado del código es ECMAScript 5.1, por lo cual funciona en cualquier sistema operativo o navegador, o, por supuesto, en Node.js. “Scala es aún más multiplataforma”, palabras de Martin Odersky.
Lo importante en este caso es no perder tampoco nada de Scala. Todas las funcionalidades quedan intactas: inferencia de tipos, clases, traits y objetos, pattern matching, implicits, etc.. Y por supuesto adoptar el paradigma de la programación funcional. Scala puede interoperar con JavaScript, al igual que viceversa utilizando métodos de definidos en nuestro código desde el propio JavaScript.
Con el código generado por Scala.js puede ser usado en nuestros proyectos ejecutándose en Node.js, integrandolo con HTML, usando el DOM mediante la librería para Scala.js, reaccionar a input del usuario, usar jQuery (por ejemplo) o, por supuesto, testear nuestro código con uTest o Phantom.js. El código generado para entornos de producción se optimiza siguiendo el Google Clousure Compiler. Os recomiendo este tutorial para comprender todas las funcionalidades posibles.
En definitiva, más que un compilador Scala.js supone un nuevo ecosistema para atraer código Scala en entorno JavaScript. El aporte de compartir y reutilizar código del servidor en cliente o realizar un acercamiento más profundo con la programación reactiva de la mano de Scala y React Native.
Más información | Scala.js, Tutorial de Scala.js
