Ayer se conocía una noticia muy interesante: el gobierno de la Comunidad de Madrid, encabezado por el polémico Ignacio González, anunció la creación de una asignatura de Programación de carácter obligatorio para los alumnos de los cuatro cursos de la ESO (de 12 a 16 años). Esta asignatura se implantará en 15 institutos seleccionados durante el curso escolar que empieza en breves días y durante los dos próximos cursos alcanzará el 100% de los institutos públicos de la Comunidad de Madrid.
Todavía no se conocen temarios de las asignaturas pero se asegura que se estudiara programación web, de aplicaciones móviles y de videojuegos además de otros contenidos aledaños como robótica o impresión 3D. Habrá que ver como casa esta nueva asignatura en este presente de recortes en materia de educación que vivimos pero a priori parece una muy buena noticia que debería conseguir a medio-largo plazo jóvenes mejor formados en temas tan primordiales como el pensamiento estructurado y las nuevas tecnologías y, a corto plazo, más puestos de trabajo (aunque esto todavía está por ver, claro).
Esta iniciativa del gobierno autonómico madrileño (englobada dentro de un paquete más amplio de medidas para empezar a aplicar la comprometida LOMCE) es prácticamente pionera ya que en toda la Unión Europea sólo el Reino Unido contempla la programación en su curriculum académico. Precisamente hoy mismo el prestigioso The Guardian publica hoy un artículo en el analiza los desafíos que la enseñanza de la programación en las aulas enfrenta... y, curiosamente, la conclusión no es nada halagüeña.
¿Vosotros qué opináis? ¿Buena iniciativa? ¿Contraproducente? ¿Habría que empezar la enseñanza de la programación antes de la ESO incluso? Los comentarios está abiertos para que podáis expresaros con libertad (y buen rollo y educación, por favor).
Vía | El País
Imagen | UTC Library
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