Dropbox ha cambiado recientemente sus términos de usuario, algo que siempre hace que todo el mundo se ponga a revisar dichos cambios en busca de alguna treta que se hayan podido sacar de la manga. Lo que más ha llamado la atención es que, a partir de ahora, los términos fuerzan a cualquier usuario que quiera quejarse formalmente a un arbitraje previo con Dropbox.
Digámoslo de otra forma más sencilla y evitando verborrea legal: lo que quiere Dropbox es que si alguien quiere quejarse, poder sentarse con él antes de que se emita ninguna reclamación e intentar resolver el problema amistosamente. No es una mala medida, pero los términos dicen que hay que hacer ese arbitraje (intento de resolución amistosa) sí o sí a menos que comuniques lo contrario mediante este formulario.
Esto es lo que dicen textualmente las nuevas condiciones:
bq. Intentemos primero una resolución amistosa. Queremos solucionar tus problemas antes de que sea necesario recurrir a medidas legales. Antes de registrar una reclamación formal contra Dropbox, aceptas intentar resolver la disputa informalmente a través de dispute-notice@dropbox.com. Intentaremos resolver la disputa informalmente poniéndonos en contacto contigo por correo electrónico. Si no hemos resuelto la disputa en un plazo de 15 días a partir del envío, cualquiera de las partes (Dropbox o tú) podrá registrar una reclamación formal.
bq. Ambas partes aceptan someterse a arbitraje. Ambas partes (Dropbox y tú) aceptan resolver cualquier reclamación en relación con estas Condiciones o los Servicios a través de un proceso de arbitraje vinculante y final, excepto en lo establecido en las Excepciones del acuerdo de arbitraje que encontrarás a continuación.
Otro punto polémico es el de las acciones conjuntas, donde los términos nos dicen que tendremos que hablar con Dropbox individualmente sin hacer ninguna demanda o acción judicial con más personas involucradas. Ni siquiera podremos usar los servicios de un representante. David (tú) contra Goliath (Dropbox).
bq. Restricción de acciones conjuntas. El usuario solo podrá resolver disputas con Dropbox a título individual, y no podrá realizar reclamaciones como demandante o participante en una demanda conjunta, consolidada o a través de representación. No está permitido recurrir a arbitrajes conjuntos, acciones conjuntas, acciones generales con abogados privados ni consolidación con otros arbitrajes.
Podéis leer todas las condiciones de Dropbox aquí. Estos cambios son algo intimidatorios a mi parecer, limitando los recursos que un usuario puede usar en el caso de que quisiese emprender acciones legales contra la compañía. El servicio es ampliamente utilizado por cientos de millones de personas y no creo que esto tenga ningún efecto boicot, pero seguro que esto fruncirá más de un ceño.
Vía | Lawyerist Imagen | Ian Lamont
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